Y también bajarán los sueldos

Mintiendo, mintiendo, mintiendo. Ayer, al presentar la reforma laboral, Soraya Sáenz de Santamaría escondió parte de los cambios. Se centró en el despido y omitió hablar de otro aspecto importante de la reforma, la degradación de los salarios de los españoles.

La prensa ha colaborado con la tarea. O lo ha ocultado, como El País, donde en la edición prensa del sábado no dice nada (ahora ha aparecido la noticia en la versión digital, un día después), o peor aún, nadie se leyó el BOE.

Ahora es cuando en Internet empieza a aparecer el bombazo: la reforma laboral abre paso a una rebaja general de salarios.

La norma incluye la “cuantía salarial” como novedad entre las condiciones de trabajo que la dirección de la empresa puede acordar “por razones económicas, técnicas, organizativas o de producción”. Y acota que se consideraran tales “las que estén relacionadas con la competitividad, productividad u organización técnica o del trabajo en la empresa”.

Esa definición afecta a los trabajadores con sueldos por encima de los mínimos de convenio de su categoría. Por lo que supere ese mínimo, se abre la puerta a que se rebaje el sueldo casi a capricho de la empresa, pues casi siempre se podrán alegar razones de competitividad para pagar menos.

Es decir, las empresas podrán bajar los salarios como les venga en gana porque podrán alegar para “inaplicar” la “cuantía salarial” de los convenios una caída de ventas o ingresos de solo dos trimestres consecutivos, la existencia de pérdidas o la mera previsión de que vaya a haberlas.

¿Dónde estará el límite de la bajada que se va a iniciar ahora? ¿En los ochocientos euros?¿Salarios chinos para todos los españoles?

Y por último un cuento.

Érase una vez un empresario que vivía muy bien y hasta se había comprado el Cayenne de rigor con el que se iba a esquiar de vez en cuando a los Alpes.
Pero llegó la crisis y las ventas de su empresa bajaron un 10%. Rápidamente congeló el sueldo de sus empleados y no despidió de momento a nadie porque le salía muy caro y porque pensaba que cuando llegase el PP….

Y un día bajo un ángel del cielo llamado Soraya y le dijo que ya podía despedir libremente y por cuatro eurillos a quien quisiese. Y más aún, podía rebajar el salario de sus empleados a su gusto. Al enterarse de la noticia se reunió con sus colegas del Círculo Ecuestre para ver que harían. Se zamparon una buena paella y unos días después despidió ya a unos cuantos y sólo a parte de ellos los sustituyó por jóvenes emprendedores con contrato de aprendizaje a 800 eurillos al mes. Al resto de supervivientes les comunicó que les bajaba el salario un 10% y gracias que no los despidiese.

Un año después, como todos sus colegas habían hecho lo mismo, el trabajador español, o sea el consumidor, dormía aterrorizado y solo hacía que ahorrar iniciando una cadena de recortes sin fin. Las ventas le bajaron al empresario otro diez por ciento y como ahora podía hacer lo que le rotaba, les enseñó los números a la tropa y les bajó los sueldos otro diez por ciento más y además despidió a unos cuantos (gracias al nuevo “contrato indefinido”). A los contratados con contrato de aprendizaje los despidió argumentando que eran unos inútiles y contrató otros, pero unos cuantos menos, claro. Así seguía manteniendo los resultados de su empresa y el Cayenne y los Alpes seguían en su sitio.

Y la tropa asustada de nuevo recortó aún más, y las ventas le bajaron de nuevo y bajó los salarios y despidió a más gente ¡gracias Soraya! y etc., etc.

Hasta que un día se dio cuenta que el negocio se había ido a freír puñetas. Todos a la calle, o sea al paro, y sin indemnización (quiebra bien hecha como es menester, sin activo del que sacar ni un euro, “no sea que además de cerrar el negocio estos zánganos se me lleven el patrimonio” musitó el sabio empresario). Y ni Cayenne ni Alpes, ni paella en el Círculo Ecuestre con los colegas.

Y colorín colorado todos acabaron parados y en la ruina, gracias a la sabiduría macroeconómica de Tontoro & Guindilla, los dos nuevos payasos económicos que alegran este país sin descanso.

Estaba todo el mundo avisado que después de los funcionarios vendría los "no funcionarios", pero votaron PP. ¡¡¡¡Felicidades!!! Grecia está ya cada día más próxima.

Y después de bajar los sueldos a los "no funcionarios" les dirán a los funcionarios: ya véis que todo el mundo se baja el sueldo y vosotros privilegiados con empleo seguro ganando un buen sueldo... ¡a bajarlo, hombre! y después...