1) Dice el refrán que no hay peor sordo que el que no quiere oír.
2) Los franceses son más listos.
3) Propongo que además los fusilen (a los presidentes autonómicos).
Como vamos de listos, o así se lo creen los que ahora nos gobiernan, seguimos a piñón fijo, como el Costa Concordia, aunque el barco se vaya aproximando a tierra y el riesgo de naufragio se acerque día a día.
Las previsiones sobre el naufragio ya las ha avanzado el FMI: dos años de recesión, con el -1,7 % este año. Opino que se quedan cortos. Nos hundiremos más.
Todo depende de cómo se les vaya la mano en la reforma laboral, ya que la CEOE, o sea el empresariado español, está al acecho como tiburones para conseguir despedir a todo el mundo por cuatro euros y volverlos a contratar (a unos pocos) por salarios miserables y con contratos y condiciones propios de chinos (o de los portugueses que ya han conseguido llegar con éxito a niveles parecidos). Ahora, cuando las cosas en el gobierno ya no se ven como en la oposición, les empiezan a entrar dudas y ya no están por la labor de hacer toda la sangre que pide la patronal.
Montoro también tiene muy claro que el barco va hacia unos peñones inmensos que van a enviar la nave a freír churros y avisa de que no vamos a cumplir el 4,4% de déficit (por más que recortemos), pero nuestra iluminada capitana, Soraya, no le ha gustado que la tripulación del barco se raje y ya ha advertido que aquí se va a recortar lo que haga falta, es decir, hay que hundir el barco pase lo que pase.
Cuando el programa de la TV3 catalana, Polonia, nos mostraba la parodia de la jura del cargo de Rajoy, quien estaba asustado con lo que se le venía encima, destacaba por contra la actitud decidida de Soraya, quien parece ser que va a ser el “martillo de herejes” de este país. No hay como ser hija de un "ilustre" militar de la dictadura (Soraya) o de guardia civil (me refiero a Alicia Sánchez Camacho en Catalunya).
Ya vemos, que puestos a hacer cumplir el déficit, ¿por qué no enviar a la cárcel a los dirigentes que no cumplan? ¿Habilitarán el castillo de Montjuich, como en los buenos tiempos? Y ¿por qué no fusilarlos, como si se tratase de Companys? A este paso vamos a ser el hazmerreír del mundo, diciendo estas solemnes tonterías. ¿Cuál sería el delito para poderlos condenar penalmente? Una demostración de la ignorancia supina de nuestros gobernantes.
Los franceses, un poco más listos que nosotros, no quieren caer en el error español. Ya tienen pruebas suficientes de que la austeridad no funciona: ni Irlanda, ni Portugal ni Grecia, ni España. Todos están cada vez peor. Por lo tanto, como tontos no son, quieren dirigir el barco hacia alta mar y buscar nuevos horizontes.
Nosotros seguiremos paseando entre los farallones de la costa dispuestos, como sea, a hundir el barco. No hay peor sordo que el que no quiere oír.
De momento, empobreciéndonos a pasos agigantados.
Y nada mejor que seguir riéndonos de esta tropa: parodiando a Rajoy y Montoro a través de los malogrados Tip y Coll. Los que tenemos años no hemos olvidado este sketch.
2) Los franceses son más listos.
3) Propongo que además los fusilen (a los presidentes autonómicos).
Como vamos de listos, o así se lo creen los que ahora nos gobiernan, seguimos a piñón fijo, como el Costa Concordia, aunque el barco se vaya aproximando a tierra y el riesgo de naufragio se acerque día a día.
Las previsiones sobre el naufragio ya las ha avanzado el FMI: dos años de recesión, con el -1,7 % este año. Opino que se quedan cortos. Nos hundiremos más.
Todo depende de cómo se les vaya la mano en la reforma laboral, ya que la CEOE, o sea el empresariado español, está al acecho como tiburones para conseguir despedir a todo el mundo por cuatro euros y volverlos a contratar (a unos pocos) por salarios miserables y con contratos y condiciones propios de chinos (o de los portugueses que ya han conseguido llegar con éxito a niveles parecidos). Ahora, cuando las cosas en el gobierno ya no se ven como en la oposición, les empiezan a entrar dudas y ya no están por la labor de hacer toda la sangre que pide la patronal.
Montoro también tiene muy claro que el barco va hacia unos peñones inmensos que van a enviar la nave a freír churros y avisa de que no vamos a cumplir el 4,4% de déficit (por más que recortemos), pero nuestra iluminada capitana, Soraya, no le ha gustado que la tripulación del barco se raje y ya ha advertido que aquí se va a recortar lo que haga falta, es decir, hay que hundir el barco pase lo que pase.
Cuando el programa de la TV3 catalana, Polonia, nos mostraba la parodia de la jura del cargo de Rajoy, quien estaba asustado con lo que se le venía encima, destacaba por contra la actitud decidida de Soraya, quien parece ser que va a ser el “martillo de herejes” de este país. No hay como ser hija de un "ilustre" militar de la dictadura (Soraya) o de guardia civil (me refiero a Alicia Sánchez Camacho en Catalunya).
Ya vemos, que puestos a hacer cumplir el déficit, ¿por qué no enviar a la cárcel a los dirigentes que no cumplan? ¿Habilitarán el castillo de Montjuich, como en los buenos tiempos? Y ¿por qué no fusilarlos, como si se tratase de Companys? A este paso vamos a ser el hazmerreír del mundo, diciendo estas solemnes tonterías. ¿Cuál sería el delito para poderlos condenar penalmente? Una demostración de la ignorancia supina de nuestros gobernantes.
Los franceses, un poco más listos que nosotros, no quieren caer en el error español. Ya tienen pruebas suficientes de que la austeridad no funciona: ni Irlanda, ni Portugal ni Grecia, ni España. Todos están cada vez peor. Por lo tanto, como tontos no son, quieren dirigir el barco hacia alta mar y buscar nuevos horizontes.
Nosotros seguiremos paseando entre los farallones de la costa dispuestos, como sea, a hundir el barco. No hay peor sordo que el que no quiere oír.
De momento, empobreciéndonos a pasos agigantados.
Y nada mejor que seguir riéndonos de esta tropa: parodiando a Rajoy y Montoro a través de los malogrados Tip y Coll. Los que tenemos años no hemos olvidado este sketch.
1 comentario:
El presidente de Extremadura se mostró tan entusiasmado con la idea de llevar el déficit presupuestario al código penal, que llegó a afirmar que deberían aplicarse las sanciones con carácter retroactivo. Olvidó un pequeño detalle: la Constitución garantiza en su artículo 9 la irretroactividad de las normas sancionadoras no favorables. Y modificar este artículo no sería tan sencillo como la última aberración perpetrado contra ella, porque pertenece al título preliminar. Esto obligaría a un proceso de reforma más complejo que incluye disolución de las cámaras y referendum obligatorio.
Una prueba más de lo irreflexivo y disparatado de la propuesta.
Saludos
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