Estafa por aquí, estafa por allá

La apuesta es la siguiente: apuesto doble contra sencillo a que dentro de un año las acciones de Facebook han perdido la mitad (como mínimo) de su valor. Y hasta apostaría más y es que está fácil el tema. ¿Otra burbuja punto.com? 

Hay que reconocer que los americanos son unos artistas en estos asuntos. Cuando leí que Goldman Sachs se desharía de su participación ya sospeché que esto era una burbuja impresionante. Ha salido a bolsa (millones de incautos comprando un negocio que se basa en que le paguen anuncios) y ya el mismo día un grupo de accionistas demandan a los colocadores (por falsear el número de usuarios y las proyecciones futuras). Nos divertiremos con el tema, y aprovecho para recordar que por aquí esto ya lo inventamos hace tiempo con Terra. 

Pero para salidas a Bolsa, la de Bankia. Cuando salió a Bolsa esta entidad, juraron que toda la porquería inmobiliaria estaba en la matriz, BFA, y por lo tanto los accionistas compraban un banco limpio de polvo y paja. Pues lo que compraron es un “cacho de bujero” de 20.000 MM. de euros (y lo que haga falta, para esto no hay problema). Felicidades. Compré acciones unos días después de la salida a Bolsa y me duraron tres días en cartera. Olía a azufre. 

Por lo tanto tenemos unos accionistas a los que se les ha estafado. ¿Qué hacían los auditores? ¿Qué hacía el Banco de España? En este caso ya lo sabemos: Fernández Ordoñez se dedicaba a la insigne tarea de pedir día sí, día no, la reforma laboral, tarea para la que no le pagaban. En cambio ya vemos que no ejercía con su deber profesional. ¿Le pedirá alguien responsabilidades? ¿Se las pedirán a Rato por haber colocado unas acciones que valían mucho menos de lo que se afirmaba? De momento la suspensión de la cotización en Bolsa, no sea que se hunda su precio con la noticia. 

Por si alguien confía en la putrefacta justicia española, nada mejor que el ejemplo que hemos visto estos días. Catorce años, ¡CATORCE!, después de los vertidos de Aznalcóllar, la justicia vuelve a estar en el punto de partida y finalmente, después de pasarse la pelota de unos a otros, ha decidido quien ha de juzgar este delito. Hay que felicitarlos.

Ha llegado también la hora de reírse de aquellas pruebas de stress (¡las hicieron dos veces!) que demostraban que la banca española estaba de rechupete, que las provisiones eran impresionantes y que nuestra banca era de lo mejorcito y los habíamos engañado tan bien a todos que ¡hasta el New York Times afirmaba en el 2008 que la banca española era "un modelo para los creadores de la política global en busca de ideas frescas para evitar una repetición de la debacle"!. Retorciéndome estoy de risa. Y he aquí que ya tenemos Banco Nacional. Como toda esta porquería ya no la quiere nadie ni a peseta (perdón, a un euro, que ya me adelanto demasiado a los acontecimientos) pues no le queda más remedio al gobierno (o sea a nuestro bolsillo) que quedársela. ¿La fusionará para sanearla e intentar encontrar comprador? Más cierres de oficinas, más paro a la vista. Más deuda para el Gobierno y probable rescate bancario a la vista. 

Y mientras, recorta que te recortarás, que con la Sanidad y la Educación la factura bancaria pagarás. Eso sí, para fiestas y cohetes aún queda y la ciudad más endeudada de España tiene las santísimas pelotas de seguir proponiendo unos juegos olímpicos. ¿Sabe la gente de donde proviene gran parte del endeudamiento griego? Pues de unos juegos olímpicos que fueron un fracaso y que costaron cinco veces más de los previsto. También me río cuando oigo que dicen que esto es para el 2020 y que entonces ya no estaremos en crisis. Se olvidan que las inversiones habría que hacerlas ya, o sea el endeudamiento (porque habría que endeudarse) se iniciaría en los próximos años. 

La Olimpíada es el acontecimiento perfecto para la corrupción. Porcentajes y porcentajes de dinero negro para financiar a los partidos (en este caso, el partido) y algún que otro bolsillo. Lo que más me indigna es que presenten el tema como una oportunidad generadora de puestos de trabajo. Si quieren generar puestos de trabajo tienen la oportunidad de hacerlo de forma inmediata en las escuelas, universidades y hospitales. Eso nos aporta algo. Hacer canales para remar o para pruebas de aguas bravas (que quedarán en desuso porque, lógicamente, no habrá dinero para mantenerlos, como pasa con el velódromo de Barcelona) es tirar el dinero. Menos mal que otros tienen más cerebro que nosotros y nos evitarán el desastre. Por cierto, hablar de un coste de solo 1.900 MM. es un buen chiste. 

Pero lo nuestro es la salvajada al estilo Alguaire, pueblo de LLeida mundialmente famoso porque tiene un aeropuerto sin aviones y una autopista sin vehículos. Lo primero, lo del aeropuerto, lo conoce todo el mundo. Lo de la autovía no es tan conocido, pero es igual de infame. Resulta que nuestros ilustres políticos decidieron que era necesaria una gran inversión para comunicar Lérida con las pistas de esquí de Baqueira. Naturalmente había multitud de inversiones prioritarias, pero que los pijitos fuesen a esquiar a Baqueira pudiendo sacar humo a sus Cayennes, cosa que no pueden hacer con la carretera actual, parece ser que era prioritario. Así que manos a la obra. En vez de empezar la autovía por Lleida e ir avanzando hacia el Norte, pues construyeron un tramo aislado al norte de esta ciudad, entre las poblaciones de Alguaire y Almenar. Total, que ahora no sale a cuenta salirse de la carretera habitual (2,4 Km.) para hacer este tramo de siete kilómetros y volver luego a la ruta normal (otros 2 km.). Hay que felicitarlos por esta autovía sin coches.