Peyresourde (1.569 m.) – Peyragudes desde Arreau

Y después de playear por Cádiz (vacaciones sin bici), regresé de nuevo al pedaleo, pero después de tantos días de ocio las rodillas se pusieron a protestar después de subir a Superbagneres de Luchon. Los años no perdonan y mis cartílagos, desaparecidos en combate después de haber bajado tantas montañas en mi vida, necesitaban reforzante. Tanda de infiltraciones y ya totalmente nuevo. Recorrido de 48 Km. para probar que todo estaba en su sitio otra vez ¡y a por el Peyresourde vertiente Arreau!

Al Peyresourde subí el año pasado desde Luchon, pero arriba, en el puerto, había niebla y una rasca de cuidado, así que no me llegué a la estación de esquí de Peyragudes, que está un poco más alta.

Sin embargo hoy he pillado un día de bandera, de esos que disfrutas a lo grande, porque este puerto, por esta vertiente, es una maravilla.

He dejado el coche en el campo de fútbol/rugby y escuelas, donde se puede aparcar sin problemas y está cerca de la rotonda que lleva ya al inicio del puerto. Viniendo de España no hay que entrar en Arreau. Nos desviamos a la derecha (cartel que indica el puerto) en una rotonda, e inmediatamente viene otra. En esa segunda rotonda no hay que tomar ya el puerto (lo haremos con la bici) y nos vamos hacia el pueblo. 500 m. más allá está el campo de fútbol.

Los kilómetros iniciales son de pendiente placentera. Mucho tráfico ya que este tramo inicial es también la carretera que lleva a Val Louron-Loudenvielle, un valle maravilloso desde donde una vez partí para subir a un tres mil, el Gourdon.

Se pasa por la población de Bórderes-Louron, donde hace poco fueron fiestas y el río estaba aún engalanado, y en Avejan finalmente las carreteras se bifurcan y ya iniciamos propiamente el exigente puerto. Se gana altura rápidamente al ir al 8-9-10 % y la vista a la derecha sobre Val Louron es sensacional. El tráfico a partir de este punto se normaliza.

Val Louron desde el Peyresourde 

En Bórderes, mientras hacia la foto del río engalanado, pasó un grupo de ingleses y rápidamente me he pegado a rueda, pero en subida poco se gana chupando rueda ya que la velocidad es baja. El problema de pegarme a otros es que me olvido de beber y comer y al fin lo he pagado, ya que la batería se ha agotado y el último kilómetro (9%) iba caracolillo.

Bórderes en fiestas

 
Y los cinco ingleses a los que me enganché pasando por delante de la escuela. 

Da la sensación de estar en un puerto de los Alpes. La última parte no tiene bosque y el sol le da de lleno, pero con prados verdes por doquier es una maravilla.

Vista desde el collado hacia la vertiente de Arreau. A la derecha se ve el bar. Fántastico en Setiembre ver aún nieve.

Esta vez se estaba a gusto en el puerto y me he pedido una CocaCola en el chiringuito/refugio para recuperar azúcar rápidamente, ya que después quería subir a la estación de esquí de Peyragudes. Y es que el domingo la Vuelta España finaliza etapa aquí arriba. La etapa más dura de la Vuelta, que parte de Andorra y recorre cuatro puertos (Cantó, Bonaigua, Balés y Peyresourde/Peyragudes).

Chiringito-Refugio en el puerto. Oferta para grupos: 12 Crepes 5 €

Sentado bajo una sombrilla me he dedicado a ver como iban llegando más y más ingleses. Viaje organizado de travesía del Pirineo de Hendaya a Cérbere. De mar a mar ¡en cinco días! Alguna inglesa también en el grupo. Aplausos y vítores (con fotos y vídeo) así como iban coronando el puerto. La mar de divertido. La pandilla lo llevaba bien organizado, con microbús de apoyo y remolque con todo tipo de recambios (bicicletas adicionales incluidas). Así ya se puede. Lo mío tiene más mérito. Solito y sin apoyo.

El microbus con remolque de los ingles@s

Bye, bye, ingles@s

Hoy iba con equipación totalmente MoviStar (casco, maillot, culotte, guantes y calcetines). Un inglés de los que me ha pasado en mi último kilómetro-caracolillo me ha pedido probarse mi casco.”¿Qué tal? Es que quiero cómpramelo”, me ha dicho. “Pues lo estreno hoy, así que no puedo decirte”. Y le ha hecho unas cuantas fotos al casco. También me han filmado cuando llegaba al puerto. Les debe haber hecho gracia ver un MoviStar al completo.

Para ir a Peyragudes hay que bajar unos pocos metros por la misma vertiente que hemos subido y empieza un tramo que ópticamente parece largo, pero en un momento se está en la estación.

Si alguien quiere imaginarse como sería este planeta después de una guerra con bombas de neutrones, solo tiene que visitar una de estas estaciones de esquí en verano. Absolutamente nadie. Terrible.

Peyragudes desierto

Desde la estación no hemos de volver sobre nuestros pasos. Una carretera sale pendiente abajo y empalma unos kilómetros después con la carretera del collado. Es un tramo fantástico, con un piso formidable, unas curvas deliciosas, y un panorama espléndido. Y tráfico cero patatero, por lo que se puede bajar a saco paco.

Panorama (unos 180 grados) bajando desde la estación, que queda arriba a la izquierda

Y un placentero descenso, ya sin ingles@s y con algún ciclista aún dándole al pedal hacia arriba. Y feliz y contento he vuelto por el túnel de Bielsa, que aún está con el semaforito.

La única altimetría que he encontrado es esta, pero creo que no es correcta.

Añado el perfil grabado por mi potenciometro IBIKE Newton, que es bastante correcto. Hace pocos días que instalé este potenciometro en mi bici y el nivel de información que llega a grabar es bárbaro. No solo ha grabado el perfil del recorrido. Los colores marcan las diferentes actitudes que he tenido sobre la bici.

Marrón: pedaleando
Naranja: sin pedalear
Violeta: voy a caballito sin sentarme
Rojo: voy frenando

Y esto es lo menos importante de todo lo que llega a grabar. Ya iré hablando del tema.