¿Quién no ha oído alguna vez en algún espectáculo al aire libre a un vendedor de caramelos gritar este eterno lema?
Claro que el vendedor de caramelos no decía lo del "recorte". Eso lo dicen nuestros nuevos ministros, que en sus primeras escaramuzas entrando a tropel en los ministerios y blandiendo tijeras, hachas y hasta sierras mecánicas en plan "La matanza de Texas", no se han quedado cortos en el objetivo: 16.500 MM. de euros, que van a hacer mucha pupa teniendo en cuenta la sequía del 2011.
Pero lo que me deja anonadado es leer que los recortantes (nueva profesión ministerial con gran futuro, ya que ¿quién es el recortador que recortará a un recortante?) tienen tan solo cinco días para conseguir podar esa inmensa cifra, eso siempre que el 2011 no se cierre peor de lo previsto y que el 2012 no haga aguas (que las hará), aunque ya sabemos que el objetivo verdadero no es disminuir el gasto, sino desmontar el Estado.
¿Cómo se puede recortar con eficacia en tan pocos días? ¿Tiene idea un ministro de los gastos de un ministerio nada más entrar? ¿Puede tomar decisiones correctas?
La respuesta es evidentemente no, lo que pasa es que hay un método tremendamente rápido para recortar: se toma la partida de un gasto en concreto y se mira en la lista que ha facilitado nada más traspasar la puerta el nuevo ministro. Si esta en la lista, ¡yu-yu! eso ni se toca y es que como decía la canción de Objetivo Birmania, los amigos de mis amigas son mis amigos y se pasa inmediatamente al siguiente item de la lista. Los que no sean amigos de mis amigos, lo tienen chungo.
Ejemplo (es un suponer): en el Ministerio de Defensa la partida de misiles ni se toca, no vayan a estropearles la fiesta a los ex del nuevo jefe.
Como ejemplo de cómo van a ir las cosas leía que en la nueva adjudicación de los contratos de limpieza de los cuarteles, que ahora hacían pequeñas empresas, será obligatorio que estas empresas puedan dar sus servicios a nivel nacional. ¿Qué razón hay para ello? Pues una muy clara: las empresas pequeñas no podrán dar ese paso y las grandes se quedarán el pastel y las pequeñas tendrán que cerrar. Se supone que las empresas grandes agradecerán de alguna manera el gesto del ministerio, ya que de otra forma no se entiende esta decisión. Será interesante ver que empresas se llevan el gran bocado.
Visto el ruido de tijeras que emana de los edificios ministeriales, el nuevo ministro de economía, Luis de Guindos, ya asume que tendremos recesión el primer trimestre del año. Y yo me atrevo a pronosticar que el segundo y el tercero, etc. Lo bueno es que ya empieza engañando, ya que dice que su objetivo es crear empleo. Eso es lo que dirá permanentemente mientras toma cientos de medidas que llevarán al desempleo a mucha más gente.
Para cubrirse de lo que viene el PP ya empieza a orquestar maniobras orquestales en la oscuridad. Por ejemplo Rajoy afirmó el otro día en la sesión de investidura que tenemos cinco millones y medio de parados, cuando en realidad son cinco. ¿Pretende con esto adjudicarles los 5,5 MM. que tendremos dentro de pocos meses al gobierno anterior, cuando en realidad los 0,5 MM. que van a caer, son y serán culpa de las nuevas políticas gubernamentales?
Pero para recortes los de la reina neoliberal: Esperanza Aguirre. Aquellos que tengan una enfermedad importante, con baja prolongada, pueden tener serios problemas económicos. Esta “señora” tiene la humanidad en el mismísimo trasero. Y mientras la gente practicando el avestrucismo, que consiste en poner la cabeza en el agujero para no ver lo que está ocurriendo… y seguir votándola porque es de los míos, como si los partidos políticos fuesen equipos de futbol.
Y para añadirle sarcasmo ilimitado a la situación, ya solo hace falta el aterrizaje de Ana Botella, quien ha anunciado que persiste en el objetivo olímpico, una locura económica en estos tiempos, y que además "gobernará para los desfavorecidos", toda una burla inmensa.
El calendario Maya tenía razón, el 2012 va a ser el principio del fin, al menos en España.
Objetivo Birmania: los amigos de mis amigas son mis amigos
Claro que el vendedor de caramelos no decía lo del "recorte". Eso lo dicen nuestros nuevos ministros, que en sus primeras escaramuzas entrando a tropel en los ministerios y blandiendo tijeras, hachas y hasta sierras mecánicas en plan "La matanza de Texas", no se han quedado cortos en el objetivo: 16.500 MM. de euros, que van a hacer mucha pupa teniendo en cuenta la sequía del 2011.
Pero lo que me deja anonadado es leer que los recortantes (nueva profesión ministerial con gran futuro, ya que ¿quién es el recortador que recortará a un recortante?) tienen tan solo cinco días para conseguir podar esa inmensa cifra, eso siempre que el 2011 no se cierre peor de lo previsto y que el 2012 no haga aguas (que las hará), aunque ya sabemos que el objetivo verdadero no es disminuir el gasto, sino desmontar el Estado.
¿Cómo se puede recortar con eficacia en tan pocos días? ¿Tiene idea un ministro de los gastos de un ministerio nada más entrar? ¿Puede tomar decisiones correctas?
La respuesta es evidentemente no, lo que pasa es que hay un método tremendamente rápido para recortar: se toma la partida de un gasto en concreto y se mira en la lista que ha facilitado nada más traspasar la puerta el nuevo ministro. Si esta en la lista, ¡yu-yu! eso ni se toca y es que como decía la canción de Objetivo Birmania, los amigos de mis amigas son mis amigos y se pasa inmediatamente al siguiente item de la lista. Los que no sean amigos de mis amigos, lo tienen chungo.
Ejemplo (es un suponer): en el Ministerio de Defensa la partida de misiles ni se toca, no vayan a estropearles la fiesta a los ex del nuevo jefe.
Como ejemplo de cómo van a ir las cosas leía que en la nueva adjudicación de los contratos de limpieza de los cuarteles, que ahora hacían pequeñas empresas, será obligatorio que estas empresas puedan dar sus servicios a nivel nacional. ¿Qué razón hay para ello? Pues una muy clara: las empresas pequeñas no podrán dar ese paso y las grandes se quedarán el pastel y las pequeñas tendrán que cerrar. Se supone que las empresas grandes agradecerán de alguna manera el gesto del ministerio, ya que de otra forma no se entiende esta decisión. Será interesante ver que empresas se llevan el gran bocado.
Visto el ruido de tijeras que emana de los edificios ministeriales, el nuevo ministro de economía, Luis de Guindos, ya asume que tendremos recesión el primer trimestre del año. Y yo me atrevo a pronosticar que el segundo y el tercero, etc. Lo bueno es que ya empieza engañando, ya que dice que su objetivo es crear empleo. Eso es lo que dirá permanentemente mientras toma cientos de medidas que llevarán al desempleo a mucha más gente.
Para cubrirse de lo que viene el PP ya empieza a orquestar maniobras orquestales en la oscuridad. Por ejemplo Rajoy afirmó el otro día en la sesión de investidura que tenemos cinco millones y medio de parados, cuando en realidad son cinco. ¿Pretende con esto adjudicarles los 5,5 MM. que tendremos dentro de pocos meses al gobierno anterior, cuando en realidad los 0,5 MM. que van a caer, son y serán culpa de las nuevas políticas gubernamentales?
Pero para recortes los de la reina neoliberal: Esperanza Aguirre. Aquellos que tengan una enfermedad importante, con baja prolongada, pueden tener serios problemas económicos. Esta “señora” tiene la humanidad en el mismísimo trasero. Y mientras la gente practicando el avestrucismo, que consiste en poner la cabeza en el agujero para no ver lo que está ocurriendo… y seguir votándola porque es de los míos, como si los partidos políticos fuesen equipos de futbol.
Y para añadirle sarcasmo ilimitado a la situación, ya solo hace falta el aterrizaje de Ana Botella, quien ha anunciado que persiste en el objetivo olímpico, una locura económica en estos tiempos, y que además "gobernará para los desfavorecidos", toda una burla inmensa.
El calendario Maya tenía razón, el 2012 va a ser el principio del fin, al menos en España.
Objetivo Birmania: los amigos de mis amigas son mis amigos
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