Ya estamos llegando a la plenitud austera. Primero fue la Zona Euro, iniciando la nueva moda, después el Reino Unido y ahora, tal como se anticipaba, una vez certificada la victoria de los Republicanos, Obama dejó ver en su discurso anual a la nación que EE.UU. seguirá el guión establecido (un momento "sputnik"). Siempre todos como ovejas. El GEAB hace meses que dio por seguro este escenario.
Ahora se abre el telón y veremos un nuevo espectáculo. La crisis económica en pelotas y sin que nadie la vista. ¿Aguantará el frío? ¿No le pasará nada a China con tanta austeridad de los países que son sus asiduos compradores? A lo mejor resulta que esta gran potencia económica en ciernes tiene los pies de barro.
Por de pronto en el Reino Unido han empezado a tiritar. Después de la ración otoñal de cepillo que les soltaron al pueblo inglés los conservadores, estos pronosticaban un PIB del 0,2%/0,6% en el cuarto trimestre, pero hasta un estudiante de primero de económicas (al que no le han lavado aún el cerebro) habría pensado que los milagros no existen.
Y efectivamente, en vez de la cifra prevista han registrado un 0,5% ¡negativo! Se veía venir. Pero eso no es lo peor. Además la inflación se disparó hasta un 3,7%. Tocaría empezar a pensar en subir el tipo de interés (como no están en el euro pueden hacerlo) pero ¿quién lo hace con un PIB negativo? Pues ¡toma ya!, ahora problema doble, es decir estanflación, el peor escenario. Reducir el Gasto Público de forma salvaje en plena crisis les (nos) va a pasar factura (a todos).
Ahora se abre el telón y veremos un nuevo espectáculo. La crisis económica en pelotas y sin que nadie la vista. ¿Aguantará el frío? ¿No le pasará nada a China con tanta austeridad de los países que son sus asiduos compradores? A lo mejor resulta que esta gran potencia económica en ciernes tiene los pies de barro.
Por de pronto en el Reino Unido han empezado a tiritar. Después de la ración otoñal de cepillo que les soltaron al pueblo inglés los conservadores, estos pronosticaban un PIB del 0,2%/0,6% en el cuarto trimestre, pero hasta un estudiante de primero de económicas (al que no le han lavado aún el cerebro) habría pensado que los milagros no existen.
Y efectivamente, en vez de la cifra prevista han registrado un 0,5% ¡negativo! Se veía venir. Pero eso no es lo peor. Además la inflación se disparó hasta un 3,7%. Tocaría empezar a pensar en subir el tipo de interés (como no están en el euro pueden hacerlo) pero ¿quién lo hace con un PIB negativo? Pues ¡toma ya!, ahora problema doble, es decir estanflación, el peor escenario. Reducir el Gasto Público de forma salvaje en plena crisis les (nos) va a pasar factura (a todos).
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