viernes, febrero 27, 2009

Una ascensión que me faltaba: ¡El Tibidabo!


La montaña por excelencia de Barcelona (con permiso de Montjuich) es el Tibidabo (aunque hay otras muchas colinas), que tiene la modesta altura de 515 m. Nunca la había subido a pie, ya que subir andando a sitios donde te lleva el coche era como un poco tonto. Equivocado que estaba.

El Tibidabo (nombre que proviene de la biblia) es el mirador por excelencia de la ciudad y de parte de la provincia de Barcelona, ya que desde su cumbre se pueden ver por ejemplo las montañas de Montserrat, Matagalls y Montseny e incluso parte del Pirineo.

Ya hace días que quería partir del gimnasio en Can Caralleu hacia la Carretera de las Aguas que pasa solo doscientos metros más arriba. El viernes procedí a cambiarme en el vestuario y con los palos de Nordic Walking me fui a recorrer este bello camino que corta toda la falda de la montaña a una altura de 380 m. (ver mapa). Día primaveral y aunque el plan era sólo recorrer la carretera la tentación era mayúscula y me llegué a la cumbre, o sea al parque de atracciones, pasando previamente por el pie de la antena de Collserola, diseñada por Norman Foster y construida para los Juegos Olímpicos del 92.

Total 16 km. de nada, aunque el desnivel es light (de 170 a 515 m.). Adjunto recorrido grabado con el GPS y panorama de 180 grados de la ciudad de Barcelona, siempre a tus pies mientras realizas ejercicio. Realmente fantástico.

Fotos a continuación:
En la primera se puede ver Can Caralleu, con su pista de atletismo que rodea el campo de futbol y detrás las pistas de tenis. Después el Observatorio Fabra, cuya utilidad actual es casi únicamente didáctica, especialmente para los niños. Sigue una foto de los árboles abatidos por el huracán de hace unas semanas y que por Collserola también hizo estragos.
Dos fotos de los excelentes miradores de la ciudad y sigue una de una villa próxima a la cumbre construida a principio del siglo anterior. Una concepción de la vivienda horrorosa vista desde la estética de hoy en día. Más bien parecen mausoleos de cementerio. Sigue la cumbre, con el parque de atracciones, que tanto le gustó a Woody Allen por lo decadente que es (la iglesia construida en los cincuenta-sesenta es horrorosa). A continuación una foto del Matagalls y Montseny con nieve aún en la cumbre. Siguen dos imagenes de la inmensa antena y otra de uno de los dos funiculares que suben a la montaña. Esta es del funicular de Vallvidrera. Por último la panorámica (click en las fotos para verlas más grandes) y el mapa con el recorrido grabado por el GPS (que muestra con su color degradado la altura).


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