Se veía venir. Ese fue el único acuerdo Zapatero-Rajoy hace unos días. Las Cajas, en su mayoría, están quebradas, problema que incluso no se remedia con fusiones. Y la única solución es capitalizarlas.
Pero ya sabemos que la única diferencia que había actualmente entre una Caja y un Banco era que la primera no tenía accionistas. Y si no tienes accionistas, o sea inversores privados, no hay quien pueda inyectar dinero, es decir capitalizarlas. Por lo tanto, obligado es darlas de baja como Cajas y darles la bienvenida al mundo bancario.
Como habrá que pagar dividendos al capital, lógicamente la obra social de las Cajas va a sufrir un buen varapalo. Múltiples receptores de este dinero llovido del cielo durante años verán desaparecer sus ingresos de repente. El primero en sufrir la sequía será el patrimonio artístico español. ¿De dónde saldrá el dinero para su mantenimiento, con un Estado recortando precisamente en estos gastos?
Pero ya sabemos que la única diferencia que había actualmente entre una Caja y un Banco era que la primera no tenía accionistas. Y si no tienes accionistas, o sea inversores privados, no hay quien pueda inyectar dinero, es decir capitalizarlas. Por lo tanto, obligado es darlas de baja como Cajas y darles la bienvenida al mundo bancario.
Como habrá que pagar dividendos al capital, lógicamente la obra social de las Cajas va a sufrir un buen varapalo. Múltiples receptores de este dinero llovido del cielo durante años verán desaparecer sus ingresos de repente. El primero en sufrir la sequía será el patrimonio artístico español. ¿De dónde saldrá el dinero para su mantenimiento, con un Estado recortando precisamente en estos gastos?
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