Jornada importante la del miércoles ya que subí dos puertos, pero con más coeficiente, es decir, dureza, que la que me supuso hace unos días la subida al Aspin y a continuación a la Hourquette d’Ancizan.
Para abrir boca este pequeño puerto que separa Francia (Luchón) de España (Bossóst), bello y exigente, con cinco de sus más de ocho kilómetros rondando el 8% y con tramos cortos al 10 y 12%.
Día brillante después de un día de lluvia muy fuerte. El Garona bajaba bravucón… agua de España, agua del Aneto, que se va hacia el Atlántico.
No hay nada mejor para disfrutar de la bicicleta que estos pequeños puertos inmersos en pleno bosque (no hay que olvidar que estamos en realidad en Francia, ya que el hecho de que el Valle de Arán sea español se debe a un error al trazar la divisoria de aguas) y que tienen una temperatura agradable.
Puerto con carteles indicadores para los ciclistas al estilo y copia de los que hay en muchos puertos franceses. Pero el Portillçon tiene algo diferente, un verdadero problema: el firme de la carretera está lleno de agujeros (veo que la crisis ya llega al mantenimiento de carreteras ¡y es una carretera fronteriza!) en algunos tramos de la parte superior del recorrido, alguno de ellos incluso señalizados, ya que de otra forma algún ciclista francés que baje hacia España y no haya visto previamente los tramos lunares se puede pegar un piño de cuidado.
Tal está el tema que un inglés, cuando me disponía a bajar, ignorando que había subido desde el lado español, me advirtió del peligro.
Empieza a verse ya bastante gente subiendo estos puertos (a pesar de que era día laborable), especialmente ingleses y holandeses, que lo llevan todo organizado, con coches y gente de soporte y hasta los filman llegando al collado.
En lo alto de los puertos empieza a verse ambiente.
La realidad es que por el lado español había poca actividad y los ciclistas que encontré bajaban (típico circuito ciclista desde Luchón es subir el Portillón, bajar por el lado español y seguir río abajo hasta cruzar la frontera y nuevamente a Luchón, todo esto ya llano). Poco tráfico.
Bajada muy controlada en la parte de arriba y después de recuperar fuerzas al llegar abajo, me fui a Viella y ¡a por otro puerto! A por La Bonaigua, plato más fuerte, con sus 23 Km.
El Portillón: 8,5 Km. unos 600 m. de desnivel. 20-6-2012.
En estas dos fotos puede verse un grupo organizado (están esperando que vayan llegando los compañeros) e incluso los filman como puede verse.
Lo habitual estos días es hacerse etapas del Tour, pero para poder hacerlo es necesario que alguien te recoja en coche al final del trayecto.
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