Nada nuevo bajo el sol. Ninguna sorpresa. Lo previsto desde el primer momento.
Cuando el Gobierno empezó a soltar la pasta para tapar agujeros ya sabíamos que el dinero no procedía precisamente de la cueva de Alí Babá. Sabíamos prefectamente que saldría de nuestros bolsillo, gobierne el PSOE o el PP. Lo infame es que la oposición, que habría hecho lo mismo o peor, se suba al carro rasgándose las vestiduras. Recuerdo que fue Rajoy quien cuando Zapatero decidió rebajar el IRPF cuatrocientos euros a las rentas bajas dijo que era ¡una injusticia social! Pues bien, ahora que se las carga ¡DICE LO MISMO! Pero ¿la gente en España es tan tonta?
Como supongo que todo el mundo sabe ya lo que va a representar a sus bolsillos este aumento no voy a comentar las medidas. Únicamente dejar claro que los paganos serán las rentas medias y bajas. Desde el principio de esta crisis económica ya deje claro en este blog que todos los que no habíamos comprado vivienda acabaríamos pagando este desmadre a la que nos ha llevado principalmente la banca y el Euro, quienes han alimentado esta locura colectiva con dinero abundante y barato.
El IVA es un aumento que atenta contra la progresividad impositiva (es decir, que paguen proporcionalmente más los que más ganan) y que perjudica a las rentas más bajas. Pero lo pero, es lo del pez que se muerde la cola. El impacto que tendrá este aumento en los precios hará bajar más el consumo y por lo tanto el volumen de la recaudación, por lo que puede encontrarse el Gobierno que lo que gana por precios lo pierde por volumen y el efecto recaudatorio de esta medida no alcanzará lo previsto y encima habremos degradado más la economía, generando más parados que se acabarán de llevar en subsidios el poco dinero que se haya ganado con el aumento.
Una buena crítica a este aumento de impuestos la escribe Miguel Jimenez en El País de hoy. El artículo se títula Plumas de Ganso, y que empieza así:
"Jean Baptiste Colbert, estadista francés del siglo XVII, decía que el arte de la tributación consiste en desplumar al ganso para obtener la mayor cantidad de plumas con el menor número posible de graznidos. El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, con sus mensajes casi siempre confusos y con frecuencia contradictorios, ha logrado un tremendo estruendo antes de arrancar una sola pluma".
Cuando el Gobierno empezó a soltar la pasta para tapar agujeros ya sabíamos que el dinero no procedía precisamente de la cueva de Alí Babá. Sabíamos prefectamente que saldría de nuestros bolsillo, gobierne el PSOE o el PP. Lo infame es que la oposición, que habría hecho lo mismo o peor, se suba al carro rasgándose las vestiduras. Recuerdo que fue Rajoy quien cuando Zapatero decidió rebajar el IRPF cuatrocientos euros a las rentas bajas dijo que era ¡una injusticia social! Pues bien, ahora que se las carga ¡DICE LO MISMO! Pero ¿la gente en España es tan tonta?
Como supongo que todo el mundo sabe ya lo que va a representar a sus bolsillos este aumento no voy a comentar las medidas. Únicamente dejar claro que los paganos serán las rentas medias y bajas. Desde el principio de esta crisis económica ya deje claro en este blog que todos los que no habíamos comprado vivienda acabaríamos pagando este desmadre a la que nos ha llevado principalmente la banca y el Euro, quienes han alimentado esta locura colectiva con dinero abundante y barato.
El IVA es un aumento que atenta contra la progresividad impositiva (es decir, que paguen proporcionalmente más los que más ganan) y que perjudica a las rentas más bajas. Pero lo pero, es lo del pez que se muerde la cola. El impacto que tendrá este aumento en los precios hará bajar más el consumo y por lo tanto el volumen de la recaudación, por lo que puede encontrarse el Gobierno que lo que gana por precios lo pierde por volumen y el efecto recaudatorio de esta medida no alcanzará lo previsto y encima habremos degradado más la economía, generando más parados que se acabarán de llevar en subsidios el poco dinero que se haya ganado con el aumento.
Una buena crítica a este aumento de impuestos la escribe Miguel Jimenez en El País de hoy. El artículo se títula Plumas de Ganso, y que empieza así:
"Jean Baptiste Colbert, estadista francés del siglo XVII, decía que el arte de la tributación consiste en desplumar al ganso para obtener la mayor cantidad de plumas con el menor número posible de graznidos. El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, con sus mensajes casi siempre confusos y con frecuencia contradictorios, ha logrado un tremendo estruendo antes de arrancar una sola pluma".
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