Por fin llueve. Una tormentita. Y mi moto se va a mojar por vez primera. Visto el aparato eléctrico que había, me he propuesto cazar un rayo con mi digital, lo que tiene mucho mérito, porque si disparas cuando ves el rayo, vas dado. Al fin he conseguido pillar uno, que ha inundado espectacularmente el cielo de color naranja.
Nos vamos a la playa de finde y esto no pinta muy bien. Y la rodilla no se recupera. Me parece que tiene el mismo futuro que la Bolsa.
Laura me ha regalado el disco "Piece by Piece" de Kati Melua. Y lo estoy escuchando mientras las gotas de lluvia caen sobre el tejado. ¡Que idílico!
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