Bueno, pues ya soy del Club Ciclista de Graus (CCG) y el domingo hacían
una salida colectiva, probablemente la primera del año, así que me apunté a
ella: Graus-Obarra-Graus, con 80 Kms. aprox. de recorrido.
Estupendo día, aunque muy frío a primera hora, pero no hay
como pedalear para que desaparezca rápido. Y pedalear, pedaleamos de valiente,
porque la gente estaba fuerte, ya que como era carnaval en Graus, muchos
amantes light de la bici no estaban para esfuerzos después de una noche de
juerga y brillaron por su ausencia. Total, que el grupo estaba formado (me dio
esa sensación) por los más adictos y currantes. Es como si hubiese salido a
escalar en una colectiva en que todos hiciesen sexto grado sin problemas.
Un alma caritativa (Chema) se apiadó de mí y me acompañó cuando me descolgué del grupo antes de pasar Roda de Isábena, donde la carretera sube lo suyo. En esa subida Chema iba a 100 pulsaciones y yo a 170...
Estéticamente, y por tráfico, la carretera Graus-Obarra es ideal para el ciclismo. El único inconveniente es que tiene muchos tramos que después de subirlos bajas lo suyo. Cuando regresas es cuando más te disgusta, ya que si has subido en total 600 metros de desnivel (Graus-Obarra) querrías deshacerlos pedaleando poco, como ocurre en la mayoría de puertos. Pero aquí no. La vuelta tiene sus pequeños castigos.
Superado el perro suelto que siempre hay por La Roca (aunque había otros con mucha más mala uva carretera arriba) y aprendida la lección que me dio Chema de cómo es mejor asustar a un perro antes de que el perro te asuste a ti, llegamos a Obarra donde en La Cuadreta nos brindaron un desayuno que más bien era una comilona (ver foto). Los huevos los trajeron directos del corral. Unos excelentes colegas y una charradeta maja. Ya no puede pedirse más.
Este año voy a dar mucha caña por las carreteras oscenses, ya que me he apuntado a las tres marchas importantes: Puertos de Ribagorza, Trepariscos y Jacetania.
1 comentario:
Estás hecho un jabato!!
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