viernes, noviembre 29, 2013

Black Friday

En el paraíso del consumo (venido a menos), o sea EE.UU., el día después del Día de Acción de Gracias (festivo), el cual se celebra el cuarto jueves del mes de noviembre, es el día de la orgía consumista, el que se conoce como "viernes negro" (en inglés Black Friday), el día que inaugura la temporada de compras navideñas con significativas rebajas en muchas tiendas minoristas y grandes almacenes. Como complemento a la festividad, existe el ciberlunes, que es un día dedicado a compras por Internet y se celebra el lunes después de Acción de Gracias.


El "viernes negro" no es oficialmente un día festivo, pero muchos empresarios ven este día como un día festivo junto con el Día de Acción de Gracias, dándoles el día libre a sus empleados, de hecho incrementando el número total de potenciales compradores. Habitualmente ha sido el día de mayor movimiento comercial de todo el año desde el 2005.

Como España es ya una colonia de EE.UU. para determinados temas, no es de extrañar que nos haya llegado la manía importada, faltos como estamos de consumo. Por probar que no quede, pero después del falso brote en el consumo de setiembre resulta que las ventas minorista se vuelven a hundir.

Por lo tanto nada de extrañar que por aquí se apunten a lo que sea con tal de vender (algo), aunque la gente ya ha aprendido a comprar solo lo que hace falta.

Adjunto dos correos que me han llegado con ofertas del tema. Lo que pasa es que por aquí esto del Viernes Negro lo que hace es presagiar lo peor. Queda muy mal esto del NEGRO cuando ya hace tiempo que lo vemos todo del mismo color.

El consumo en España no lo salva nadie si se sigue la política económica actual.

Quien siembra, recoge.

jueves, noviembre 28, 2013

Otra sandez más de Ana Botella


Una muestra más de la falta de nivel de esta señora, que gobierna la Alcaldía de Madrid (por ser la señora de quien ya sabemos y sin que nadie la haya elegido), la tenemos hoy cuando nos ha explicado que "el PP y la reforma laboral son lo que más progreso ha traído a la Humanidad"

¿Está señora ha estudiado el bachillerato? 

Una inepta y una inculta.

miércoles, noviembre 27, 2013

Dos años

No, hoy no me voy a referir a la interminable opinión de que la crisis se va a resolver en dos años. Llevamos así desde el 2008 y no se ha resuelto,  ni visos de que se resuelva.

Me refiero a los dos años de cárcel que les han caído a los que le tiraron a la cara de la presidenta de Navarra (en aquel momento) un pastel. DOS AÑOS de cárcel por tal tontería, aunque ha sido calificado por el tribunal como "una acción corporal violenta al ser golpeada hasta tres veces con una tarta, teniendo en cuenta el hecho de que la víctima es una autoridad pública en el ejercicio de su cargo, por lo que debe considerarse atentado cualificado”.

A Carlos Fabra (expresidente de la Diputación de Castellón y del PP provincial) por un fraude a la Hacienda Pública de 700.00 euros le han caído cuatro años cuando le pedían trece años (Anticorrupción recurrirá, pero ya adelanto que no servirá de nada), pero además el propio Fabra también ha recurrido (la rebaja no le parece suficiente) y al final serán dos años para que no entre en chirona. Los delitos de cohecho y tráfico de influencias han quedado sin castigo. Aquí ya solo se pagan las estafas a Hacienda y vemos que salen baratas.

No hace mucho al expresidente de Baleares (del PP, aunque no haga falta decirlo), Jaume Matas, le cayeron seis años, pero, claro, como tenía que ir a la cárcel se lo rebajaron a nueve meses (eliminaron los delitos de malversación y prevaricación) y así se va de rositas y todos contentos.

Un pastelazo (no hay daños físicos), tiene pues el mismo castigo (o superior) que los delitos de corrupción política. Evidentemente la justicia ya hace tiempo que ha dejado de funcionar en España. Se han sumado a la corrupción y están al servicio de la Política. 

¿Un poder independiente? Ja.

No tiene desperdicio leerse la sentencia (¡pedían cinco años!)
 

Por el mar corre la liebre y por el campo la sardina…

Shangri-La es el topónimo de un lugar ficticio descrito en la novela escrita por James Hilton en 1933, titulada Horizontes perdidos. Por extensión, el nombre se aplica a cualquier paraíso terrenal, pero sobre todo a una utopía mítica del Himalaya: una tierra de felicidad permanente, aislada del mundo exterior. En la novela, las personas que viven en Shangri-La son casi inmortales, de modo que aventureros y exploradores intentaron hallar ese paraíso perdido.

No he leído la novela, pero vi en el cole la primera película que se hizo de esta novela (posteriormente se hizo otra versión con Liv Ullman de prota) y me quedó muy claro esto de los mundos ficticios. Los del PP parece ser que han aterrizado con su avión perdido en un mundo que no existe. Creen vivir en un Shangri-La económico, político y social (aunque con matices, ver comentario al final del artículo). Nada más distante de la realidad ese mundo irreal que solo existe en sus mentes.

Hace cuatro días que el ministro Montoro nos decía que los salarios no bajan, cuando Rajoy hacía horas les había dicho todo lo contrario a los japoneses. El PP sueña con que la reducción de salarios se traduzca en empleo. Pero ná de ná. Mirar, les dijo a los japoneses, en vez de fabricar en China y después pagar transporte para llegar a Europa y además pagar aduanas, nada mejor que fabricar ya en España, dentro de la UE, sin aduanas, sin coste de transporte y con salarios (y sin derechos laborales) casi chinos. 

Se pensaban estos del PP que bajando salarios los empresarios españoles se iban a desbocar creando empleo y ahora resulta que solo se crea empleo si se vende y tanto da que los salarios sean chinos.
Se pensaban el PP y los empresarios que la jugada de bajar salarios iba a ser una maravilla, la poción mágica. Se mejoraban las cuentas de resultados con un coste salarial más bajo y algún día, pensaban, se recuperarán las ventas y entonces tendremos unos beneficios sabrosones. Pero resulta que no, que las ventas se hunden y lo comido por lo servido. Empresarios (los pequeños) y trabajadores, hundidos, todos en el mismo pozo.

Hoy Rajoy miente de nuevo y nos dice que España ya no destruye empleo. En su Shangri-La de ensueño resulta que todo se arregla y así el consumo aumenta, la banca ya está saneada y da crédito, el PIB crece (una porquería), ya no hay inflación y la Bolsa sube y por el mar corre la liebre y por el campo la sardina. La OCDE (que no vive en Shangri-La) nos da otra información. Y UPyD les pide a los que viven en el limbo (o sea el PP) que expliquen la magia potagia.


Que sigan en su mundo virtual y sigan mintiendo con tanta desfachatez y ya verán que hostia se pegan.

Nota: Indicaba arriba que el PP vive en un Shangri-la, pero hay que matizarlo. Y es que el Shangri-la de la novela es un un recinto de paz, «donde gobiernan los mejores, no los más fuertes», en el que perdura la cultura y espiritualidad del mundo y en el que las leyes que rigen el valle se basan en la moderación y el respeto. Nada que ver con el PP.

jueves, noviembre 21, 2013

Otro paso más

Se va poniendo en evidencia (por si no estaba claro), que esto es ya más bien una dictadura en la que un gobierno impone su ley ¡y de que forma!

Rebajados los salarios de los empleados públicos (y sus vacaciones), rebajados los salarios de los trabajadores privados, establecido el sistema para rebajar las pensiones, borrados del mapa los derechos laborales, aumentados los impuestos (directos o indirectos, pagados por la clase media, e incluso estableciendo tasas para acceder a la justicia, que es otra forma de recortar los derechos), aprobado el despido libre sin casi indemnización, pasada la factura del descalabro bancario a los contribuyentes, controlado el Tribunal Constitucional de forma que cualquier ley a gusto del PP pueda ser aprobada, incrementadas las facturas de la energía a destajo para satisfacer a los oligopolios, eliminada la competencia bancaria para crear un oligopolio financiero que además no da crédito impidiendo la recuperación económica, establecida una política económica en la cual el objetivo primordial son los beneficios empresariales y no la creación de empleo (después de invitar a todo aquel que no tenga trabajo a que se largue de España), iniciado el proceso de demolición de las televisiones públicas, iniciada la privatización y liquidación del patrimonio público, recortada la sanidad (con repago farmacéutico), en marcha la demolición la enseñanza pública, haber informado a los discapacitados que como mejor están es muertos, después de haber indultado a todos los amiguetes, después de haber prohibido que haya mendigos, demolida la Justicia como poder independiente, al servicio ya del Gobierno (véase la sentencia del Prestige), queda ahora por demoler los derechos democráticos y llevar a este país a tiempos de la dictadura franquista, época de ensueño del empresariado español, en la que el ciudadano sencillamente no tenía derecho a nada y obligación a todo. 


La ley que promueve el ministro del interior Jorge Fernández es evidentemente una ley anticonstitucional, ya que en la Constitución se consagra el derecho de manifestación como uno de los fundamentales de los españoles, pero como ya sabemos quién gobierna este Tribunal, podemos dar por aprobada la nueva salvajada que se avecina a la que le quitarán alguna coma para mostrar lo bondadoso que es este Gobierno y de que escucha al pueblo, como la propuesta que hace ahora a los pensionistas de subirles un 0,50% en vez del 0,25%. Una burla.
La contaminación que sufre el PP al tener alojada en el partido a la rancia extrema derecha lleva a extremos tan chuscos como el que observamos al ver que este ministro meapilas propone multas de hasta 600.000 euros para aquel que interrumpa una misa. Ni Franco se atrevió a tanto. Recuerdo que 600.000 euros son 100 Millones de pesetas. Aquí hay alguien que ha perdido el oremus. Tan es así que la norma podría llamarse de Protección de la Policía más que de Protección de la Seguridad Ciudadana. Si no, es inexplicable que Interior amenace con sanciones de hasta 30.000 euros a quien insulte a un agente cuando esté “velando por el mantenimiento del orden público” en una manifestación. ¡30.000 euros!
“Es un absoluto disparate y parece un código disciplinario para militarizar la sociedad”, resume el magistrado emérito del Tribunal Supremo José Antonio Martín Pallín, que alerta de que recurrir una multa de estas dimensiones por la vía del contencioso administrativo puede suponer 2.000 euros solo en tasas, mientras que por lo penal es gratis.

Puestos a prohibir, hasta el botellón queda incluido en la ley. Eso sí, si solo perturba la tranquilidad ciudadana. Tendrán que definir que es la tranquilidad ciudadana.

Pero la imposibilidad de publicar imágenes de la policía en acción incluida en esta ley atenta contra los derechos básicos de información. Es evidente que lo que se busca es posibilitar cualquier acción policial en las manifestaciones (contundencia franquista) sin que se pueda publicar lo ocurrido. Naturalmente la ley impedirá las manifestaciones en los lugares claves y pronto veremos cómo se monta un manifestódromo en medio de los Monegros, reserva natural para manifestaciones por supuesto autorizadas y siempre que no sean muchos.


Pero grave es también la que se anuncia como nueva ley de huelga. Ya había una. ¿Qué se pretende “revisándola”? Pues sencillamente ponerle tantos impedimentos a las huelgas que ya no sean tales. Mientras la Constitución permite la huelga, las leyes del PP la impedirán de facto. Quedan muchas cosas por privatizar y no puede fallarles el tiro como ha ocurrido con la limpieza. Ahora van a por los del alumbrado de las farolas de Madrid. ¡En Catalunya se están privatizando las depuradoras del agua!

Muy grave este paso. Trabajo tendrá el nuevo gobierno español que suceda al PP (esperando que una coalición UPyD-PP no sea el nuevo Gobierno, porque entonces apaga y vámonos) para darle vuelta al calcetín teniendo en cuenta que el empresariado español está encantado con todo esto. 

¿Y si proponemos multas de 600.000 euros para los políticos corruptos?

Siento un asco tremendo.

En la foto de arriba el meapilas en una procesión.




El ajedrez (como Teruel), también existe

Pero, claro, eso ocurre allende nuestras fronteras ya que por aquí solo existe lo que da dinero (y a unos pocos).
Leía el domingo pasado una entrevista a María Vasco, la única atleta española que se ha llevado una medalla olímpica hasta la fecha, quien acaba de colgar las zapatillas y nos explica cómo se ha forrado (es broma) a lo largo de sus muchos años de práctica de su deporte, la marcha atlética. Calculo que le habrá salido a cinco euros la hora, es decir, mucho sudar y nada en el bolsillo.

Aquí quien no practica el fútbol, baloncesto, automovilismo, tenis y golf no casi no existe, salvo que haga patria. Basta ver en televisión como en cada Telenoticas dedican soberanos y aburridos minutos a cansinas noticias DIARIAS (hasta el agotamiento) con las últimas estupideces emitidas por los practicantes de estos deportes. Pero es el deporte que da dinero y por lo tanto el deporte que interesa.

Decía esta atleta que su deporte solo existe cuando llegan las olimpíadas, o los campeonatos del mundo o europeos. En ese caso a la marca España le interesa el medallero y cual Guadiana aparecen algunos deportistas en los medios. Por unos días nos enteramos de sus vidas (especialmente si ganan una medalla) y después son enterrados hasta nuevo aviso. Así ocurre con el ciclismo, que aparece en Julio y Setiembre y deja de existir el resto del año.

Otros deportes lo tienen peor. Por ejemplo, el alpinismo y la escalada solo salen en los medios cuando alguien se mata o pone una banderita en una cumbre. El morbo y el nacionalismo (incluido el español) le dan a veces unos minutos de pantalla y unas líneas en la prensa a estos deportes y así recordamos que existen.
Pero hay otros, como el ajedrez, que están desaparecidos en combate. ¿A quién le interesa esto de descerrajarse el coco sin cobrar? A nadie. 

Pues bien, informo que se está celebrando el Campeonato del mundo de ajedrez en Chennai (India) entre Viswanathan Anand (India, 43 años), eterno defensor del título, ya que lo ha ganado en sus cuatro últimas ediciones, y el joven noruego Magnus Carlsen (22 años).

Magnus Carlsen se ganó el derecho a disputar el título a Anand en un torneo feroz contra los mejores ajedrecistas mundiales. Quedó empatado con el ruso Kramnik, pero Carlsen había obtenido sus puntos con una victoria más y este factor lo convirtió en vencedor del torneo.

Al igual que en otros deportes, en el ajedrez la edad no perdona, tal como se está viendo en las nueve partidas celebradas hasta este momento.

Las cuatro primeras fueron tablas (respeto y miedo), pero a continuación Carlsen le ganó dos seguidas a Anand en base a pequeñísimas ventajas muy bien explotadas. Luego de nuevo dos tablas y hoy otra derrota, esta increíble, ya que ha cometido el indio un error que normalmente no se da a este nivel.
Como el campeonato es a 12 partidas y están ya 3-6, quedando tres, tendría que ganar las tres partidas restantes Anand para salvar el torneo. Dado que no ha ganado ni una está ya claro que con unas tablas en la próxima partida Anand acabará con esta tortura y finalizará el campeonato. 

Dada la juventud de Carlsen, creo que tendremos campeón para rato, aunque su estilo no me gusta ya que es defensivo y por lo tanto no derrocha mucha imaginación. Educados ya en la época de los robots, las personas juegan cada vez más como las máquinas.

El tema informático es cada vez es más impresionante. Pueden seguirse las partidas en vivo en Chessbomb, con comentarios, y pueden seguirse con imágenes en directo en la FIDE. En Chessbomb tienen conectado un Houdini 3 x 64 que calcula hasta una profundidad de 20 jugadas en 30 segundos, evaluándolas y dejando bien claro cuales son las cuatro mejores. Cuando quedan menos piezas en el tablero esta profundidad aumenta. Hay que tener en cuenta que el número de jugadas posibles aumenta más o menos geométricamente a cada movimiento. Es decir, si tenemos aprox. 15 jugadas posibles en el primer turno, tendremos 15x15= 225 jugadas posibles teniendo en cuenta lo que puede responder el contrario y así en cada movimiento iremos multiplicando por 15 (naturalmente este número varía en cada jugada). Una profundidad de 20 jugadas examina cientos de millones de jugadas. Por eso, desde que Kasparov perdió contra Deep Blue, ningún jugador quiere retar ya a las máquinas.

Precisamente estos días me acabo de comprar un ordenador bastante potente (Intel core i7-3820 3,60Ghz/32gb memoria 1600MHz /ssd hyper x 3k kingston 120gb/Gigabyte GeForce GTX770) y en 30 segundos llega hasta una profundidad 16 (utilizo el programa Fritz 12) (en términos técnicos mi PC está en 3.200 kN/s *). Brutal, lo que pasa es que es descorazonador ver los millones de jugadas que lleva calculadas el PC mientras que uno empieza a entrever la situación después de cada movimiento.

Antes cuando acababan las partidas de un campeonato venían horas de estudio para ver las posibles alternativas que habían tenido los jugadores durante la partida y encontrar donde se habían equivocado. Ahora el análisis es online y cuando acaban la partida los jugadores pueden saber de inmediato donde se han equivocado, ya que los espectadores que siguen la partida a lo largo del planeta ya hace rato que lo saben.

Al menos en este blog, el Ajedrez existe.


 * kN/s significa el número de jugadas, en miles, que un ordenador calcula por segundo. Así cuando indico que mi nuevo ordenador calcula 3.200 kiloNodes por segundo, estoy indicando que calcula 3,2 millones de jugadas por segundo. Por lo tanto en 30 segundos habrá calculado 96 millones de jugadas y además encontrando las mejores a realizar en el siguiente movimiento.
Deep Blue calculaba 200 millones de jugadas por segundo y era en 1997. Si ahora hiciesen un ordenador dedicado a jugar al ajedrez está cifra sería enormemente superior. Ningún campeón retará a un ordenador.

domingo, noviembre 10, 2013

Salida con el Club Ciclista Graus a Castigaleu


Salida social de noviembre con destino a Castigaleu (desayuno) y después recorrido circular con regreso por Tolva-Benabarre y otra vez hacia Graus.

Cuatro grados a las 8.30 de la mañana. Las temperaturas a mediodía siguen siendo altas para la época, pero las noches son frías y hasta que el sol calienta hay que abrigarse para ir en bici de buena mañana.

Nos juntamos nueve ciclistas (veo que siempre van siendo los mismos) en la Placeta de Barcelona, alguno de ellos muy valiente, ya que llevaba las piernas en plan veraniego. 

Viento de cola en la subida hacia Lascuarre. Siete grados en la subida a la Cabanera y rápido descenso hasta el lugar del desayuno, que para mi sorpresa era en la casa de Paco, o sea en el Mas (o casa) Castell. Pongo lo de “Mas” porque lo que oía hablar a la gente de la casa era el catalán (perdón, que ahora es el LAPAO) y el nombre de la casa ya es de por si suficientemente explicativo.

Un desayuno pantagruélico que superó el de Obarra en Febrero y que hicimos sentados al aire libre y es que este otoño permite cosas de estas. Me di por desayunado, comido y cenado. Nos pusimos en la mesa pasadas las diez y nos levantamos casi a la una. El horario ya lo dice todo.



Acostumbrado como estoy a pedalear en solitario estas salidas en grupo me encantan y chupar rueda aún más. Si no fuese así seguir a esta gente a la que doblo en edad sería imposible. Van como motos. Aún así voy a mi límite.

Al finalizar el ágape apareció el viento y decidimos volver por donde habíamos venido, ya que el descenso del tramo Benabarre-Torres se presentaba durillo con tanto viento de cara.


Así que volvimos a subir hasta la Cabanera de Castigaleu (aunque por esta vertiente es mucho más corto) con la longaniza saliéndome por la boca. 

Los muchachos me bajaron el puerto al galope, que con el piso en el estado que está tuvo su gracia. Y yo que pensaba que bajaba rápido...

Y regreso con fuerte viento de cara, pero dos valientes tiraban del grupo reduciéndonos el esfuerzo.

Una jornada inolvidable. Agradecerle a Paco el detalle que tuvo con esta invitación.

Los peques ya dan pedales.


lunes, noviembre 04, 2013

Premios varios (especialmente el Nobel)

Parece ser que a los humanos les priva esto de dar premios y recibirlos. Unos y otros disfrutan a lo grande. Ahí tenemos al Rey de Suecia entregando los premios Nobel concedidos por la Academia Sueca o al Príncipe de Asturias entregando sus premios anuales (¿sabe alguien de donde sale el dinero de estos premios?¿No será de nuestros bolsillos...?). También hay empresarios que aprovechan lo de los premios para hacer Marketing y chupar cámara. Un ejemplo es el Planeta de Literatura, entregado por el presidente de la compañía, José Manuel Lara. Mucho premio y poca literatura.

Podemos empezar por el premio Nobel. Originalmente Alfred Nobel creó el premio que lleva su nombre y que se otorga cada año a personas que efectúan investigaciones, ejecutan descubrimientos sobresalientes y llevan a cabo el mayor beneficio a la humanidad o una contribución notable a la sociedad. Los premios inicialmente eran cuatro: Literatura, Medicina, Física y Química. Este lote ya llevaba incorporada una bomba de relojería: el premio literario.

Pero como no había suficiente con uno, le añadieron dos más: el Premio Nobel de la Paz y el de Economía. Este último fue un añadido realizado en el año 68 y que nunca se ha considerado propiamente un Nobel ya que lo concede el Banco Central de Suecia. Como a Alfred Nobel no le gustaban las matemáticas, la Ciencia por excelencia se quedó sin premio.

Son y serán estos tres premios fuente sistemática de problemas y por lo tanto asistiremos anualmente a estropicios sin fin.

En la Literatura el tema es espectacular. Cada año la lista de escritores con “puntos” abundantes para llevarse el Nobel es barrida (o sea despreciada) por la Academia. Siempre hay un escritor no incluido en la lista que merece el Nobel (al menos este 2013 no han desvariado como en años anteriores). Hay que epatar. Ejemplos de los últimos años han sido los premios a los “conocidos” escritores Jean-Marie Gustave Le Clézio, Herta Müller, Tomas Tranströmer y Mo Yan. La regla se rompe con el premio que se le dio a Vargas Llosa, pero ya sabemos a que gremio pertenece este escritor y por lo tanto no extraña que se lo dieran. Memorable el Nobel otorgado en su día a Camilo José Cela, quien parece ser que tenía un negro que le escribía, ya que esto de escribir es una tarea muy cansada y Don Camilo se dedicaba a comer bien entre otras cosas. Y sin olvidar la denuncia por plagio que acabó en los tribunales. Al negro se le acabaron las ideas y había que seguir vendiendo.

Naturalmente, a los cinco minutos de concederse el Nobel de Literatura, ante el asombro general aparece siempre el “Gran Lector”, el que se lo lee todo y nos deja con un palmo de narices. También hay que epatar. Recomiendo tener un libro de cada escritor en la biblioteca, por raro y minoritario que sea, para así jugar a este juego de lucimientos.

Sobre el Nobel de la Paz mejor correr un tupido velo. Premiados fueron dos sanguinarios como Kissinger, Beguín y Rabin, y aún me pregunto que hicieron para merecerlo (ver lo que dice el escritor Juan Marsé sobre Kissinger en la entrevista publicada este domingo). Pero al igual que los jugadores de domino, que se doblan, la Academia repitió hazaña concediendo el Nobel a Obama, quien no ha parado de disparar desde que asumió la Presidencia. Bueno, deben ser las suyas guerras para lograr la paz.

Y finalmente llegamos al de Economía, premio fuertemente contestado y criticado por favorecer habitualmente a los economistas más «ortodoxos» evitando las corrientes «heterodoxas» y a los estadounidenses sobre otras nacionalidades. Estas críticas consideran que el historial de concesiones está sesgado hacia la economía neoclásica, especialmente la Escuela de Chicago (10 premios), y que el 80% de los premiados son estadounidenses (65%) o británicos (15%). Además, la mayoría de los ganadores del Premio han sido hombres, y sólo hasta 2009 una mujer, Elinor Ostrom, consiguió el premio por primera vez.

Y supongo que para evitar críticas de este tipo este año han rizado el rizo, dando el premio a tres economistas, dos de los cuales sostienen teorías dispares, lo cual supone de entrada que uno de los dos premiados está equivocado (y a lo mejor los dos), pero dada la ausencia de carácter científico del discurso económico ya todo es posible. Naturalmente el pensamiento neoliberal se lleva su premio (el gremio es el gremio) y precisamente se lo dan a Eugene Fama, defensor de la Hipótesis de los Mercados Eficientes y cuyas teorías a la vista de lo ocurrido en la crisis actual han puesto en evidencia que son más bien fruto del deseo. Ya se sabe que los economistas están para hacer teorías que satisfagan ideologías. Pagan bien. El tiempo luego las invalida, pero tanto da. Ya han cobrado y encima hasta puede caer un Nobel.

En el caso de Eugene Fama incluso ni se inmuta y es que cuando se está en posesión de la verdad, la teoría siempre es correcta y es la realidad la que se equivoca. Fama afirma sin pestañear lo más mínimo que la crisis ha mostrado lo acertado de sus teorías. Y a recoger el premio.

Dicen sus teorías que los mercados son eficientes y que siempre fijan correctamente los valores de los activos. Shiller (y otros muchos más), otro de los premios Nobel de este año, se burla de esto. Veamos lo que nos dice sobre el tema: “…descubrí que había ciertas lagunas en la teoría del mercado eficiente, que representaba la ortodoxia de las finanzas, cosas que sencillamente no tenían sentido. Los economistas que presentaron esa teoría sostenían que en los mercados, todo el mundo hacía cálculos, cálculos sobre el valor actual. 

Eso es un disparate, porque sabemos que el 90% de la población ni siquiera sabe lo que significa eso: no hace ningún cálculo. Entonces los defensores de la teoría dijeron: bueno, en realidad no es que todo el mundo haga todos los cálculos, sino que el mercado se comporta de forma eficiente porque la gente se deja asesorar por los expertos y los gestores de inversiones. Evidentemente, eso también es falso. Puede que haya algunas personas que lo hagan. Pero no todo el mundo, ni siquiera la mayoría de la gente. Se convierte en algo ritualista; tenemos un determinado modelo en el que se cree porque otras personas creen en él, y así sucesivamente”.

Hay burbujas continuamente, nos dice Shiller. Vimos una burbuja en los precios de las acciones de las empresas PuntoCom, que acabó con su correspondiente explosión llevándose por delante a miles de inversores. De esta burbuja pasamos a la inmobiliaria cuya explosión tuvo y tiene aún consecuencias planetarias.
Vimos como un grupo de Bancos manipulaba el Libor (equivalente al Euribor en el mercado de la libra esterlina) alterando la fijación de su precio, lo que ha supuesto fuertes multas y la dimisión del presidente del gran banco holandés Rabobank.

Y justo estamos saliendo de este mangoneo y vemos como otro grupo de bancos está alterando el mercado de divisas. Casualidad o no el euro se ha desvalorizado mucho estos días finalizando un proceso alcista bárbaro. ¿Lo estaban creando los especuladores de estos bancos?

Mercados eficientes = ¡Premio Nobel!

Lo que más me sorprende es el peloteo que han dirigido todos los economistas a los ganadores a efectos de enjabonar a los colegas (no hay que hundir el negocio) y echarle un tupido velo. Lo cierto es que dar el Nobel a dos teorías opuestas es infumable y la Academia, que tiene justificación para todas sus decisiones (lástima que no la tenga para el Nobel concedido a Scholes y Merton en 1997, un error brutal ya que la fórmula Black-Scholes es incorrecta), lo razona diciendo que ya no premia teorías (dado lo resbalazido de la Ciencia Económica, que siempre se equivoca) sino el esfuerzo para teorizar y avanzar en el conocimiento de esta Ciencia.

Krugman empieza escribiendo en su blog sobre este Nobel citando la vieja chanza entre economistas de que la Economía es el único campo donde dos economistas pueden ganar el Nobel diciendo exactamente lo contrario, pero al final se suma también al peloteo. Al fin y al cabo están todos en el mismo juego trilero.

Nota: Shiller es el autor del formidable libro, que ya comenté en su día, Animal Spirits.

 
View blog top tags