Que no te enteras, Contreras

Estaba volando (virtualmente, claro) el otro día de Dubái a Ciudad del Cabo, en Sudáfrica, en un vuelo con el cual he batido mi record de distancia (4.243 millas náuticas) y he sobrevolado once países (otro record) de una tacada.

Aunque parezca una solemne tontería nunca antes me había situado (geográficamente) tan bien en este planeta como ahora gracias a mi afición al vuelo virtual. Es un descubrimiento adicional al placer de volar.

Para efectuar un vuelo tan largo necesitaba incorporar a mi flota un avión facultado para volar largos trayectos. Y he aquí que PMDG, la compañía dedicada a crear aviones virtuales de alta calidad, necesarios para practicar aquellos que desean ser pilotos comerciales, ponía a la venta recientemente el Boeing 777-200LR, precisamente el avión desaparecido (y desaparecido en los medios, que ya se han olvidado de él, ya que casi ha dejado de ser noticia).

Hay que recordar que el autor de El principito, Antoine de Saint-Exupéry, cayó con su avión en las costas marsellesas durante un vuelo de reconocimiento, en julio de 1944. Algunas teorías dicen que quizá fue derribado por un caza alemán. En 1998, un pescador encontró entre sus redes una pulsera de plata con el nombre del escritor y el de su mujer. Y al fin, en 2004, un buceador dio con los restos de su avión a 80 metros de profundidad. Total: 60 años desaparecido. A Amelia Earhart y Glenn Miller no se les encontró nunca. Este mundo es injusto, ya que puestos a perderse se podía haber perdido el Dragon Rapide de Franco. Habríamos ahorrado un millón de muertos y 40 años de miseria.

Un poco macabro esto de utilizar este avión, el 777, en este momento, pero es el avión ideal, ya que es el avión comercial que tiene mayor alcance del mundo. Sin las restricciones de fuel obligatorio para emergencias podría dar la vuelta al planeta en tres vuelos. Increíble. Y por eso el vuelo perdido MH370 de Malaysia Airlines ha podido ser llevado a una zona del Índico muy remota.

Aprovecho para mostrar unas fotos de esta locura (acorde con los tiempos que vivimos) que es Dubái. Esta ciudad, gracias a varias chifladuras, rascacielos (con el edificio más alto del mundo, el Burj Khalifa de 828 m. de altura) y urbanizaciones de alto standing como las islas artificiales (The World) y la de la palmera (Palm Islands), han convertido esta ciudad en destino turístico, aunque la crisis también puso en solfa esta saga de delirios.
 

También quiero comentar que las compañías aéreas de los emiratos (los emiratos son siete: Abu Dabi, Ajmán, Dubái, Fuyaira, Ras al-Jaima, Sharjah y Umm al-Qaywayn) lo están haciendo muy bien y están dando sopas con onda a las compañías aéreas europeas, como leí esta misma semana.

Emirates es una de ellas y tiene su base en Dubai. Y mira por donde he descubierto que esta ciudad, con un super moderno aeropuerto, es un excelente hub desde donde hacer vuelos que cubran África y Asia. Por lo tanto el vuelo Dubaí-Ciudad del Cabo lo he hecho con el 777 de Emirates.

He aquí unas cuantas fotos del vuelo.

El 777-200 en la terminal de Emirates en Dubái, con el rascacielos mayor del mundo al fondo.

A la iquierda el complejo de islas "The World" y el edifico "Vela", similar al de Barcelona. Como puede observarse, cuando acaba la ciudad empieza el desierto.

Palm Island

Y la segunda "palmera" que se quedó en proyecto inacabado por la crisis.

Cruzaba el golfo de Aden con tormenta a la vista. Esto no era nada comparado con la que venía después cruzando el ecuador desde Kenia (previamente había descubierto que Etiopía tiene picos de cuatro mil metros) hasta Tanzania (no pude ver la isla de Zanzibar).

Dando botes (es increíble ver cómo pueden llegar a flexionarse las enormes alas de estos aviones que dan cabida a miles y miles de litros de fuel) y oyendo (y viendo) al granizo chocar  contra los cristales, me pillé la prensa del día, y allí estaba otra vez el señor Torreblanca que sigue sin enterarse de lo que ocurre con Ucrania.

Empecé a leer el artículo pensando que por fin se había enterado de algo, pero resulta que todo lo que decía era para explicar al final del artículo que todo eran teorías conspiranoicas. Mentira que EEUU y su comparsa, la UE, quieran emparedar el comercio con Rusia y atar a Europa.

Recomiendo al señor Torreblanca que se lea el informe del GEAB de este mes y así a ver si de una vez se entera de lo que es y persigue el TTIP, o sea el tratado comercial que están negociando en secreto la UE y EE.UU. y que se resume así: yo te compro petróleo (el del fracking) y armamento (que te has de defender de los malos, o sea de los rusos) y tú me compras Mercedes y BMW, por decir algo. Más neoliberalismo y liberalización a la vista con todas sus consecuencias para los mindundis de a pie. A ver si nos enteramos de que lo que persigue este tratado es dar poderes a las multinacionales por encima de los poderes democráticos de los países del tratado (EE.UU.-UE).

Y para evitar que la pereza de enlazar con el artículo haga que algunos no se lo lean, he aquí lo que dice el GEAB:

- Nota publica de GEAB N°84 (15 de abril de 2014)

Europa arrastrada a una división del mundo entre los deudores y los acreedores: soluciones desesperadas en Estados Unidos que no quiere hundirse solos

La actual confrontación entre Rusia y Occidente en la crisis ucraniana inevitablemente recuerda la guerra fría y los medios de comunicación son evidentemente muy proclives a eso. Pero, contrariamente a lo que ellos dejan sobreentender, no es Rusia quien busca reinstalar una cortina de hierro sino, más bien, Estados Unidos. Una cortina entre las viejas potencias y los países emergentes, el mundo de ayer y el mundo de mañana, a deudores y a acreedores. Y esto en la esperanza un poco loca de preservar la American way of life y la influencia de Estados Unidos sobre « su » campo a falta de poder imponerla en el mundo entero. En otras palabras, zozobrar con la mayor cantidad de compañeros posible para tener la impresión de no zozobrar.

Para Estados Unidos, la apuesta actual es arrastrar hacia ellos todo el campo occidental para poder continuar dominando y comerciando con suficientes países. Asistimos así a una formidable operación para el cambio de opinión de los líderes europeos con el fin de asegurar gobernantes dóciles y comprensivos frente al patrón estadounidense, sostenido por una guerra relámpago (blitzkrieg) para atarlos definitivamente con el TTIP y aislarlos de lo que podría ser su tabla de salvación, el BRICS, sus inmensos mercados, sus dinámicas de futuro, su lazo con los países en vías de desarrollo, etc. Analizamos todos estos aspectos en este número de GEAB, así como la sutil explotación del temor de una deflación para convencer a los europeos de adoptar los métodos estadounidenses.

Teniendo en cuenta el peligro de los métodos empleados por Estados Unidos, no hace falta decir que dejar el barco estadounidense no sería un acto de traición por parte de Europa, sino un gran paso adelante para el mundo tal como lo hemos ampliamente analizado en GEAB anteriores. Desafortunadamente los líderes europeos más razonables están completamente paralizados y la mejor estrategia que serían todavía capaces de implementar actualmente, en el mejor de los casos, parece ser un simple retraso, por cierto útil y bienvenido pero no suficiente…

Presentamos en este comunicado público fragmentos de los capítulos 1 y 2.

CAEN LAS MÁSCARAS

En la era de internet y los casos de tipo «-leaks », guardar un secreto se hizo difícil para los agentes secretos y para los países con las manos sucias. Además de las revelaciones de Snowden o de Wikileaks, supimos recientemente que Estados Unidos estaba detrás de una red social en Cuba que pretendía desestabilizar a su gobierno (3). También se pudo ver un vídeo, oportunamente filtrado en Youtube, que mostraba a los estadounidenses maniobrando detrás del golpe de Estado en Ucrania. Tanto que parecería que ellos no son inocentes en la desestabilización actual de Erdogan en Turquía, país que detallaremos su situación en el próximo número del GEAB... las máscaras caen... con evidencias ciertas, ahora ya nadie puede ignorar.

Pero Estados Unidos ya no está satisfecho con los países en desarrollo y las repúblicas bananeras... En Europa, también se las arreglan para, uno tras otro, cooptar a los líderes para que dócilmente sigan los intereses estadounidenses. Dejó de ser «lo que es bueno para General Motors es bueno para Estados Unidos», como lo declaraba Charles Wilson (exdirector general de GM) en 1953, ahora es « lo que es bueno para Estados Unidos es bueno para Europa ». Ellos que ya tenían el apoyo de Cameron, Rajoy, Barroso, Ashton consiguieron el de la Polonia de Donald Tusk aunque era fuertemente reacio a principios de su mandato, el de Italia gracias al oportuno golpe de Estado de Renzi, y de Francia de Hollande/Valls gracia, en particular, a la reorganización ministerial y un primer ministro poco sospechoso de antiamericanismo. Contrariamente al principio de su mandato cuando jugó la carta de la independencia de Malí o de otros frentes, François Hollande ahora parece totalmente sometido a Estados Unidos. ¿Qué presiones sufrió? Alemania, por su parte, se resiste un poco, pero ¿por cuánto tiempo? Ahondamos esta reflexión en la sección Telescopio.

Europa es arrastrada así hacia el interés estadounidense que no es el suyo, ni en términos de política, ni de geopolítica, ni de comercio como lo veremos. Mientras que el BRICS escogió una vía opuesta y procuran librarse cueste lo que cueste de la influencia ahora profundamente nefasta de Estados Unidos, Europa es por el momento el pato de la boda. Lo demuestra por ejemplo la compra por Bélgica de 130 millardos de bonos del tesoro estadounidense en tres meses, de octubre 2013 a enero de 2014 (último dato disponible), es decir a un ritmo anual superior a su PBI... no es ciertamente Bélgica misma que es responsable de esta aberración sino, por supuesto, Bruselas lo que es decir la UE como pequeño soldado estadounidense.

Políticamente Europa es ahogada por Estados Unidos que pueden saltar de alegría en ausencia de todo liderazgo. Y el medio de sellar definitivamente esta influencia estadounidense sobre Europa se llama TTIP…

RÁPIDAMENTE UN TTIP

Lo documentamos ya ampliamente: a pesar a los discursos triunfantes sobre la « reactivación » que descansa en los precios inmobiliarios que vuelven a subir y la Bolsa que a está más alta, la economía real de EE.UU. está en situación desesperante. La tasa de carencia de alimentos es mayor que en Grecia.

A la derecha, porcentaje de la población que no puede permitirse suficientemente alimento, por país (a la izquierda, evolución 2007-2012). Fuente: Bloomberg / OCDE.

Las tiendas, inclusos las baratas, cierran las puertas por falta de clientes. La demanda de préstamos inmobiliarios son los más bajos, lo que es de mal agüero y presagia una reversión inminente como lo anticipamos en GEAB n°81.

Pero, como ya lo dijimos, allí tampoco está lo esencial. La apuesta mayor de TTIP, es la preservación del dólar para los intercambios comerciales y la conservación de Europa en el regazo estadounidense es con el fin de evitar que se constituya un bloque Euro-BRICS capaz de contrapesar a Estados Unidos.

Así la crisis ucraniana, bajo el pretexto de la agresividad rusa y la falta del suministro de gas es una buena manera, por pánico, para imponer la agenda de Estados Unidos y los lobbies a dirigentes europeos demasiado débiles para actuar. Lo que no estuvo previsto, es que el interés de estas lobbies no va forzosamente en el sentido que se cree...

Precisamente El País (al que le gusta todo lo que huele a Neoliberal y a la vez juega a progresista) de hoy hace referencia de refilón, sin mentar su nombre, a este tratado en ciernes y dice lo siguiente:

Tratado comercial con EE UU: Sí mayoritario al acuerdo, pero con condiciones

Con 26 millones de parados y una atonía económica que se avecina larga, las instituciones comunitarias han publicitado un acuerdo comercial con EE UU como fuente de empleo y riqueza para los dos territorios. Las negociaciones se han visto entorpecidas por dos elementos. El primero es intrínseco al proceso: las dudas sobre la hipotética rebaja de los estándares de calidad en Europa que supondría establecer un libre comercio con los norteamericanos, amén de las resistencias de Francia en el área cultural. El segundo es ajeno, pero ha logrado ralentizar las discusiones durante meses: la desconfianza hacia Washington a raíz del escándalo de las escuchas masivas en la Unión.

Conscientes de que el electorado es sensible a ambos argumentos, los partidos se han puesto en guardia ante un pacto que, de otra manera, no habría provocado mayores resistencias. Con la excepción de los liberales, que abogan abiertamente por firmarlo en la próxima legislatura, el resto de partidos matizan —o rechazan directamente, en el caso de la izquierda radical— el acuerdo. Los conservadores saludan el libre comercio con EE UU “siempre que se salvaguarden los altos estándares europeos y los elementos de la identidad europea”. Los socialdemócratas lo vinculan al cumplimiento de derechos sociales, laborales y medioambientales.

Con argumentos parecidos, Los Verdes van un paso más allá y se oponen al acuerdo “en su forma actual” porque debilita la protección europea. Al contrario de lo que ocurre en otros asuntos, la Comisión deberá tomar muy en consideración los reparos de los partidos. Sin el visto bueno de la Eurocámara no es posible aprobar ningún acuerdo comercial. Más allá de los complejos detalles técnicos, “el pacto requiere de un empujón político; ahora mismo falta voluntad de avanzar”, admitía hace unos meses un alto cargo del Ejecutivo comunitario.

Si la izquierda lo ve con malos ojos ya se puede adivinar a quien va a beneficiar.

Aterricé en Ciudad del Cabo (que tiene un enorme cabo adentrándose en el mar) y nada más pisar la terminal tiré a la papelera el periódico.

Lo dicho: Torreblanca, que no te enteras, Contreras.

Y para disfrutar un rato volví a volar, pero de otra forma muy diferente. A mi flota he incorporado un avión sensacional para las distancias cortas: el Twin Otter DHC-6 (un avión STOL, es decir que puede aterrizar y despegar en pocos metros, casi en cualquier sitio), que puede llevar esquís y ser también hidroavión. Es el avión que más se ha utilizado para volar de Kathmandu a Lukla.

Los paseos por los Alpes, con sus lagos y montañas son algo maravilloso con este avión tan dócil y fiable. Cuento ya con decenas de fotos, y es que el amanecer y atardecer por los lagos y glaciares es un disfrute sin fin. Los escenarios de Suiza y Austria cuentan con desarrollos adicionales en FSX de máxima categoría, lo que hace que lo que ves (las fotos que acompaño tienen peor calidad) esté próximo a la realidad. 

¡Guauuu! A la izquierda el Schreckhorn -pico del miedo- (4.078 m.) y el Lauteraarhorn (4.042 m.) y a la derecha el Finsteraarhorn (4.273 m.)

Recorriendo el glaciar más grande de los Alpes (23 km.), el Grosser Aletschgletscher y aproximándome a KonkordiaPlatz.

He cruzado el Jungfraujoch y virando a la derecha paso por delante de la cara norte del Eiger.

Esto es en Suiza, en los Grisones, con el Piz Bernina (4.049 m.), al fondo derecha, y su glaciar norte.

Volar por el Valais y el Oberland se ha convertido en una distracción frecuente, con aterrizajes en glaciares o en las aguas de los lagos. Los aeropuertos de partida son Sion y Lugano. Supongo que algún día podré disponer de tiempo suficiente para hacer un clip. 

Cuando hace unos días me pilló un atardecer de esos inolvidables volando por los lagos Maggiore-Lugano-Como pensé que de alguna forma alguno de estos vuelos debía quedar grabado en video.

Aeropuerto de Lugano junto al lago del mismo nombre. ¡Que atardecer volando por los alrededores del Lago Maggiore!

Un bimotor a hélice no es un reactor y no hay que despistarse. Si te pasas de revoluciones durante un rato los motores se incendian. Por suerte llevan extintores incorporados. Esto me pasó nada más despegar de Kathmandu (puede verse que aún llevo las luces dadas) en vuelo a Lukhla y salvé la situación pudiendo volver al aeropuerto. Justillo. ¡Uf!.