Este mes de Julio está siendo realmente trágico en los Alpes. Ya van cuatro accidentes graves (con presencia de españoles en tres de ellos) seguidos y todos ellos con características muy diferentes, lo que muestra que el riesgo tiene muchas facetas.
Un denominador casi común en tres de estos accidentes es que la gente que los ha sufrido parece experta, lo que no ha evitado que la ascensión acabase en tragedia.
Y algo que reprobar a los medios: nunca acaban de explicarnos bien lo que pasó y con manifiestos errores en algunos casos. Así es difícil sacar conclusiones y aprender de los errores (si los hay) ajenos.
En primer lugar tenemos el accidente de dos catalanes en el Eiger. No nos dicen por donde subieron, pero puede deducirse que lo hicieron por la arista clásica Mitteleggi. Y digo que “puede deducirse” ya que nos dice la prensa que descendían por esa arista hacia la estación de la Jungfraujoch, lo que es imposible.
Lo más lógico es pensar es que bajaban por la normal después de subir por la Mitteleggi y hacer cumbre (ya que está claro que habían llegado a la cima) y que en el descenso por esa vía, que no tiene nada de normal ni de fácil, se fueran abajo al ir con las fuerzas ya justas. Siempre pensamos que las caídas por fuertes pendientes de nieve pueden pararse con los piolets y esto no es así, especialmente si se está agotado.
El segundo accidente se llevó por delante, de una sola tacada, a cinco personas. Ningún español aquí. Aquí hay que echarle imaginación para saber que pasó. Como no hay españoles pues el tema ya no tiene interés para los medios patrios.
También es una caída en el descenso y parece claro que era una cordada de cinco (en teoría de seis ya que uno abortó el ascenso), algo muy peligroso (y cuantos más peor) y que los guías alpinos no tienen miedo en asumir, tratando así de mejorar los ingresos de la jornada. Digo lo de ir con guía, porque si no es así se habrían encordado 2+3, que es lo lógico.
El Lagginhorn es una cumbre de 4.010 m. que se encuentra al lado del Weissmies (cumbre de 4.023 m. que ascendí hace ya unos años) en el valle de Saas Fee-Saas Grund. Es una ascensión que se puede hacer en el día (al igual que el Weissmies) gracias al teleférico del Hohsaas. Mientras la ascensión al Weissmies es todo hielo-nieve, el Lagginhorn tiene una arista final con pasos de segundo grado y pasos con escalones metálicos empotrados. Este tramo es muy aéreo, lo que significa que hay timba y si un miembro de la salchicha se cae al ir en ensamble, basta que el siguiente le siga para que el resto tenga una alta probabilidad de irse abajo.
El accidente más espectacular por el número de accidentados (nueve muertos –dos españoles- y once heridos) ha ocurrido en el Mont Maudit. Esta cumbre tiene un atractivo especial y es que se puede hacer junto con el Mont Blanc en travesía. Subiendo primero al Mont Maudit y después al Mont Blanc se evita así también la ruta normal tan multitudinaria. Por eso está ascensión está también frecuentada, pero no tanto como la vía normal, ya que es más exigente.
En este caso el accidente se debió a un alud que ocurrió a las cinco veinte de la mañana, siendo normal que a esa hora la gente ya circulase por ahí ya que es lo correcto, tanto por la longitud del recorrido como por la necesidad de tratar de evitar lo que no se pudo evitar: un alud.
Parece ser que el alud se debió a una placa de nieve ventada, lo que es razonable dada lo temprano de la hora. El alud no lo causó el calor.
Con un frente de 150 m. nadie pudo escaparse y los que se salvaron lo hicieron gracias a que el azar los hizo surfear sobre la avalancha.
Recordar que hace tan sólo tres años, en el Mont Blanc de Tacul, el pico más próximo al del accidente, ya ocurrió algo parecido con un balance de ocho fallecidos.
El cuarto accidente ha ocurrido en el propio Mont Blanc (leer esto también), en el tramo superior Vallot-cumbre, es decir en la ruta de la vía normal. Han fallecido un español y su compañera sentimental, de nacionalidad polaca. Otros dos españoles se salvaron gracias a la ayuda recibida de una cordada que partió del refugio.
No acabo de entender que los cadáveres hayan sido repatriados al lado italiano, a Courmayer.
No eran precisamente principiantes visto su curriculum y seguro que iban bien equipados. Entonces, ¿cómo se puede morir en una tormenta de nieve?
Ya Frison-Roche (no recuerdo si en Grieta en el glaciar o en Primero de cuerda) nos describió muy bien lo que significa una tormenta a esa altura en el Mont Blanc, con vientos salvajes, una caída de temperatura enorme y visibilidad cero (se camina dentro de una bola blanca).
Antiguamente había multitud de accidentes por esta causa en el Mont Blanc, pero hoy en día hay dos avances que reducen este riesgo. Uno es la previsión metereológica (muy buena en Chamonix, pero no infalible), accesible ya hoy en día desde un móvil, y la otra el GPS. Es en estos casos cuando este sencillo aparato te puede salvar la vida, siempre que sea posible dar la vuelta y volver sobre tus pasos, cosa que nunca sabremos si era posible en este accidente.
Espero que no haya más.
Foto:
En la cumbre del Jägihorn (3.406), con el Lagginhorn (después de una gran nevada –agosto-) al fondo.
1 comentario:
Falta el de los Ecrins.
http://desnivel.com/alpinismo/el-helicoptero-rescata-a-un-espanol-en-ecrins-y-se-espera-que-sus-cuatro-companeros-salgan-hoy-por-sus-medios
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