Buena película la que vi el sábado por la noche, “El puente de los espías” de Spielberg (crítica de la película en El País). Si exceptuamos los maniqueísmos obligados al ser
Spielberg norteamericano, según los
cuales los rusos son el mal absoluto y los yanquis la gloria divina, la
película puede recomendarse. El maniqueísmo llega al punto de que todas las imágenes
en las calles del Berlín Oriental (comunista) pierden el color.
La película se basa en un hecho real, el intercambio de dos
espías, uno ruso y otro norteamericano, que se produjo en Postdam en 1960 en el
puente Glienicke que une esta bella ciudad con Berlín. Paralelamente en un
puesto fronterizo entre el Berlín Oriental y Occidental (CheckPoint Charlie) se produjo por parte
de la DDR la entrega de otro supuesto espía. El hábil negociador norteamericano,
el abogado Donovan, encarnado por Tom Hanks en la película (magnífico, al igual que el espía ruso), consiguió un intercambio 2x1.
El espía norteamericano intercambiado fue el pilot-espía
Gary Powers que desde un U-2 fotografiaba las instalaciones de producción de
plutonio de la URSS conocida como Chelyabinsk-65. Al fotografiar la misma desde
arriba, se podía estimar la capacidad de disipación de calor de los
sistemas de refrigeración de la planta, permitiendo así calcular la potencia
(de salida) de los reactores. Esto habría permitido determinar la cantidad de
plutonio que se estaba produciendo, para finalmente poder afinar los cálculos
tentativos sobre la eventual producción de armas nucleares soviéticas.
Las instrucciones de estos pilotos eran de autodestrucción en caso de un incidente para no delatar estos vuelos espías y poner en conocimiento ruso la tecnología de estos aviones que podían volar a 24 Km. de altura, cosa que no podían hacer los MIG rusos.
Las instrucciones de estos pilotos eran de autodestrucción en caso de un incidente para no delatar estos vuelos espías y poner en conocimiento ruso la tecnología de estos aviones que podían volar a 24 Km. de altura, cosa que no podían hacer los MIG rusos.
Si bien estas audaces acciones realizadas por los EE. UU.
eran una clara provocación, además de una obvia violación de las normas del
derecho internacional público y/o aeronáutico, el régimen de Nikita Jrushchov
estaba "entre la espada y la pared" ya que, si realizaba una protesta
diplomática, independientemente de lo enérgica que ésta pudiese haber llegado a
ser, hubiese dejado en evidencia su hasta entonces inferioridad en tecnología
militar: eso significaba que no tenían ningún caza que pudiese operar a una
altitud siquiera aproximada a la de los escurridizos U-2, así como tampoco
(aparentemente) todavía disponían de un misil tierra-aire capaz de alcanzar un
objetivo que volase a semejante altura. Por lo tanto, hasta ese entonces habían
silenciosamente soportado la humillación de solo limitarse a detectar a los
huidizos U-2 en sus radares, sin poder hacer demasiado al respecto, mientras
aquéllos violaban impunemente el espacio aéreo soviético. No obstante, los
inminentes hechos que pronto se desencadenarían demostrarían que la URSS ya
había puesto al día su capacidad coheteril antiaérea.
Gary Powers fue derribado por un misil y capturado vivo. Los americanos
creyeron que había seguido las instrucciones y que estaba muerto e intentaron
crear toda una mentira (habitual en ellos).
El 5 de mayo de 1960, cuatro días después de la desaparición
de Powers, la NASA lanzó un muy detallado informe de prensa que decía que una
de sus aeronaves de investigación "se había perdido" al norte de
Turquía. El falso informe especulaba que el piloto podría haber perdido la
consciencia mientras que el piloto automático aún estaba activado, incluso
mentirosamente alegando que aquél había "informado, mediante la señal
radial de emergencia, que estaba experimentando dificultades [con su tubo] de
oxígeno". Incluso, para reforzar el intento de engaño, un avión U-2 fue
rápidamente pintado con el logotipo de la NASA y fue posteriormente mostrado o
exhibido ante la prensa estadounidense y mundial.
Después de enterarse de esa maniobra de encubrimiento, el
premier soviético Nikita Jrushchov, anunció al Soviet Supremo, y al mundo, que
un "avión espía", había sido derribado [en la URSS] pero
intencionalmente no hizo referencia alguna a que su piloto había sobrevivido
durante el incidente, guardándose esa vital información como su "as bajo
la manga".
Eisenhower y sus asesores "mordieron el anzuelo"
y, lógicamente pensando que el piloto habría muerto, autorizaron la divulgación
de una historia de encubrimiento, que aseguraba que se trataba de una
"aeronave de investigación meteorológica" que había entrado en el
espacio aéreo soviético después de haberse extraviado, luego de que el piloto
transmitiese por radio que estaba experimentando "dificultades con su
equipo de oxígeno", mientras volaba sobre Turquía.
La Casa Blanca reconoció que podía tratarse de la misma
aeronave, pero aun así proclamó que "no hubo intento deliberado alguno de
violar el espacio aéreo soviético, y nunca lo ha habido", e intentó seguir
con la farsa de su "operación fachada", al ordenar mantener en tierra
a todos los U-2, para controlar eventuales "problemas de oxígeno".
El 7 de mayo, Nikita Jrushchov tendió la parte final de su
trampa y anunció:
"Debo decirles un secreto. Cuando hice mi primer
informe, deliberadamente no dije que el piloto estaba vivo y bien... y ahora
miren todas las cosas tontas que [las autoridades estadounidenses] han
dicho."
No solo Powers estaba vivo, sino que además se conservaban
importantes secciones de su aeronave. Los soviéticos se las ingeniaron para
recuperar la crítica cámara de vigilancia, e incluso revelaron algunas de las
fotografías por ella tomada. Así que el incidente resultó ser una gran
humillación para la administración de Eisenhower, atrapado en una mentira, que
era a la vez evidente e innegable.
Y al salir del cine nos fuimos a tomar una copa, y ¿quién estaba
allí en la barra? Pues Kilian Jornet!!! Me sorprendió su físico, mucho más
pequeño de lo que aparenta en televisión. No pude evitar hacerme una foto con
él. Muy amable el chico.
La verdad es que con la luz que había hemos salido de espanto los dos. Pero bueno...
La verdad es que con la luz que había hemos salido de espanto los dos. Pero bueno...
Cuando estuvimos en Berlín nos recorrimos Postdam en bici y no faltó la visita al lugar donde se firmó el famoso tratado y pasamos por este puente que se abrió al tráfico en 1989.
He aquí una foto de Angelines en el puente de los espías.
Y también (visita obligada) estuvimos en CheckPoint Charlie, donde hay una reproducción exacta de la famosa garita.
Angelines en lo que aún queda de muro.
Y como aún hay gente que no sabe quien es Kilian Jornet (la gacela humana), incluyo clips.
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